Las perspectivas económicas de algunos países de América Latina son muy buenas a corto y mediano plazo, según el economista Antonio Gayoso, profesor de la Universidad George Washington, en la capital de EE.UU.
En declaraciones a voanoticias.com, Gayoso dijo que en Latinoamérica la economía sufrió menos a causa de la gran recesión del 2008 y 2009 debido a que la burbuja de la construcción y los excesos de las compañías financieras no fueron tan dañinos como en Europa y EE.UU.
Especificamente citó los casos de Brasil, Chile, Argentina, Costa Rica y Colombia, porque “tienen regímenes democráticos, han crecido con rapidez, y todos han hecho algo muy importante, han disminuido el porcentaje de la pobreza.”
Gayoso mencionó de ejemplo el caso del presidente saliente de Brasil, Luis Ignacio Lula Da Silva, que “inventó la Bolsa Familia para atacar dos cosas al mismo tiempo, la falta de educación y la pobreza”.
Según el economista, Brasil dio en el clavo creando este programa de subsidios para familias pobres a fin de que sus hijos vayan a la escuela, porque “a mediano plazo sin educacion no puede haber crecimiento”.
Gayoso recordó que “la tecnología y la productividad están basadas principalnente en la educación y la inversión”.
El profesor universitario destacó que las notables excepciones en América Latina han sido Cuba, Venezuela y Nicaragua.
“Cuba porque enfrenta una bancarrota total, algo ya aceptado por el mismo gobierno, y Venezuela porque a pesar de los grandes ingresos provenientes del petróleo se dirige cada vez más hacia una caída económica terrible”, dijo.
Gayoso agregó que “Venezuela se está derrumbando debido a las decisiones y al malgasto del presidente (Hugo) Chávez, cuyo único objetivo es mantenerse en el poder”.
También comparó el caso venezolano con el de Nicaragua, que “padece una enfermedad parecida: el ansia de poder del presidente Daniel Ortega, que se traduce en la falta de decisiones económicas necesarias, y en seguir recostado de los subsidios venezolanos”.
Respecto a la desconfianza de los inversionistas cuando un país no es democrático se preguntó “quién quiere invertir en Cuba, para que en cualquier momento le confisquen la propiedad o le roben la tecnología, como ha ocurrido con muchísimos inversores españoles”.
