Al igual que en muchas oficinas en todo Estados Unidos, personas de diferentes culturas trabajan en la sede del Servicio de Rentas Internas (IRS), en la ciudad de Washington.
Richard Regan, nativo estadounidense, se unió al IRS hace un año. Como miembro de la tribu Lumbee-Cheraw, a menudo se sorprende de lo poco que sus compañeros saben sobre los nativos estadounidenses.
"No sólo sorprende, a veces realmente me irrita", dice Regan a la Voz de América.
Sin embargo, Regan encontró la oportunidad de educar a sus compañeros de trabajo sobre su cultura.
"Me di cuenta que están dispuestos a escuchar y cambiar algunos conceptos mal concebidos acerca de los indios americanos y nativos de Alaska", explica.
Los nativos estadounidenses son uno de los muchos grupos étnicos y raciales en la agencia.
"Aquí hay personas caucásicas, afro-estadounidenses, hispanos o latinos, asiáticos, nativos. Incluso tenemos una categoría en la que un individuo puede indicar dos o más razas ", dice Elaine Ho, quien trabaja en el departamento de diversidad de la agencia.
"El IRS tiene casi un 66% de mujeres. Tenemos más de 40% de los empleados no caucásicos y un 10% de la fuerza laboral son personas discapacitadas. Por lo tanto, desde esa perspectiva, hay mucha diversidad", indica Ho.
Las leyes en EE.UU. prohíben la discriminación por raza, color, religión, sexo u origen de nacimiento y tienen como objeto garantizar la igualdad en el empleo y la educación, pero también promover la diversidad.
“Si usted está rodeado de personas que están completamente de acuerdo con usted, que se parecen a usted, que piensan como usted, que llegan a las mismas respuestas, podría pensar que está en un excelente ambiente de trabajo, pero eso también significa que diariamente se encuentra con los mismos obstáculos y problemas," añade Ho.
Como asiática estadounidense, Ho ha visto en el IRS cómo personas de orígenes diversos pueden aumentar la innovación y la creatividad en el lugar de trabajo.