En medio de la crisis, venezolanos dentro y fuera del país han optado por desarrollar iniciativas ciudadanas para afrontar las situaciones que los aquejan a diario.
Una de estas iniciativas es Defiende Venezuela, una organización que plantea promover y defender los derechos humanos en el país a través de denuncias ante organismos internacionales.
La fundadora de la organización, Génesis Dávila, asegura que existe un gran déficit entre los casos de violaciones de derechos humanos en Venezuela y el número de estos asuntos que se denuncian ante el Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
“De acuerdo al último reporte de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ellos recibieron más de 800 violaciones de derechos humanos en denuncias particulares en contra de México”, dijo Dávila.
“Recibieron 419 denuncias por violaciones de derechos humanos en contra de Colombia y en contra de Venezuela, el país que está atravesando la peor situación de derechos humanos de la región, solamente recibieron 26 denuncias. Esto es un número que no se asemeja a la realidad”, agregó la fundadora de la organización.
El objetivo de Defiende Venezuela, según Dávila, es asistir a los ciudadanos para que denuncien sus casos ante la CIDH, y educar a la población venezolana para que los mismos ciudadanos puedan hacer sus denuncias en un futuro sin necesidad de un intermediario.
“Queremos que exista una concordancia entre la cantidad de violaciones de derechos humanos y la cantidad de denuncias que se hacen por estas violaciones”, anotó Dávila.
Venezuela, la cuna de la ciudad más peligrosa del mundo, Caracas, enfrenta una inflación anual de más de 700% según el Fondo Monetario Internacional, escasez de alimentos básicos y medicinas, falta de libertad de expresión y censura.
La más reciente ola de protestas, hasta el momento, ha dejado un saldo de 28 fallecidos según la lista del Ministerio Público, más de 500 arrestos, y cientos de heridos en lo que el líder opositor Henrique Capriles describió como una “salvaje represión” por parte de la Guardia Nacional Bolivariana.
Las organizaciones Human Rights Watch y Amnistía Internacional, resaltan entre las violaciones a los derechos humanos en Venezuela las detenciones y persecuciones arbitrarias por motivos políticos, la falta de libertad de expresión, ataques a la prensa, y el uso excesivo de fuerza por parte de los cuerpos de seguridad del estado al reprimir manifestaciones.
No obstante, el gobierno venezolano niega las violaciones a los derechos humanos en el país y repudia lo que ha calificado como “acciones intervencionistas” por parte de Estados Unidos y otros países que han expresado su preocupación ante la situación de Venezuela.
Desde la perspectiva del gobierno, la nación sudamericana vive en una “vigorosa democracia” y tiene un “exitoso modelo de derechos humanos”, según un comunicado oficial de la canciller venezolana Delcy Rodríguez, emitido a finales de marzo.
“Internacionalmente se ha declarado que Venezuela enfrenta una crisis de violaciones de derechos humanos y así ha sido reconocido por organizaciones como Naciones Unidas y Human Rights Watch”, dijo Dávila.
“Precisamente se necesita que los venezolanos conozcan los mecanismos internacionales de protección cuando los mecanismos nacionales fallan en su deber de protegerlos”, puntualizó.
Dávila afirma que una de las principales preocupaciones al desarrollar la organización fue la seguridad, pero los posibles riesgos no la detuvieron.
“Solamente vivir en Venezuela es un riesgo. Solamente tener que caminar por la calle, tener que agarrar el metro, estar expuesto a la violencia que se vive en Venezuela es un riesgo inminente para la vida”, aseguró Dávila.
“Si ya vamos a estar en Venezuela, queremos estar haciendo algo que contribuya para el desarrollo de nuestro país”.
Defiende Venezuela recibe las denuncias a través de su página web y posteriormente asiste a quienes denuncien para realizar los trámites ante la CIDH.