La Unión Europea centrará su atención en la crisis de la deuda que enfrentan las economías que integran el bloque, en particular la situación en Portugal, durante una cumbre de dos días que comienza este jueves 24 de marzo de 2011, en Bruselas.
A los funcionarios de la Unión Europea les preocupa que los problemas de un país tengan un impacto negativo en el bienestar de todos sus miembros. Durante el encuentro, los países del bloque tratarán de desarrollar un plan para mantener a sus países solventes.
Sin embargo, crece la oposición a las medidas de austeridad a través de la Unión Europea. El miércoles 23 de marzo el primer ministro de Portugal, José Sócrates, renunció después de que el parlamento rechazó sus propuestas para mayores reducciones en el gasto.
Los analistas financieros dicen que el colapso del gobierno portugués aumenta la probabilidad de que se transforme en el tercer país europeo, después de Grecia e Irlanda, en 2010, en necesitar un rescate financiero para ayudarlo en sus operaciones.
Protestas
Miles de manifestantes se enfrentan con la policía en Bruselas, en anticipación al comienzo de la cumbre de la Unión Europea.
La policía belga usó gases lacrimógenos y cañones de agua contra los aproximadamente 12.000 manifestantes.
Respondiendo a llamados de los sindicatos para que protestaran, los manifestantes expresaron enfado por los planes de los líderes europeos de imponer edades de jubilación más altas y reducción de los servicios sociales en toda la Unión Europea.
Unos 30 manifestantes trataron de romper una barricada policial y arrojaron piedras a los policías.