Casi 3.000 cubanos permanecen varados en Costa Rica sin poder seguir su camino por tierra rumbo a Estados Unidos debido a la negativa nicaraguense de abrirles paso.
En busca de una solución humanitaria se reunieron este martes en El Salvador los representantes de los gobiernos de Centroamérica, Ecuador, Colombia y México, quienes están de acuerdo en crear un mecanismo seguro para que este grupo de migrantes lleguen sanos y salvos a su destino final.
En constraste a sus opiniones se encuentra el gobierno de Nicaragua, quien reiteró su iniciativa de negarles el paso a los migrantes a través de su territorio.
Washington mantiene una política migratoria de permitir la entrada de cubanos que ponen un pie en su territorio.
"Nicaragua ratifica su posición de no prestarse a legitimar políticas ilegales (migratorias)" y "exige al gobierno de Costa Rica tomar las medidas correspondientes para retirar de nuestras zonas fronterizas a todos" los cubanos, indicó una declaración leída por el representante de Managua, Dennis Moncada.
Por su parte, la ministra de Movilidad Humana de Ecuador, María Landázuri, explicó que según las políticas internacionales la creación de un corredor humanitario no aplica en esta situación porque solo es posible en situaciones de guerra o conflicto armado.
Ante esta realidad apeló a promover un "diálogo abierto y colaborativo" y tomar acciones para permitir el paso de los migrantes de manera que cada país aplique sus leyes en su territorio, pero al mismo tiempo garanticen la seguridad e integridad de los migrantes.