El aumento en los precios de los alimentos ha llevado a la pobreza a 44 millones de personas en el mundo desde junio, dijo el presidente del Banco Mundial (BM), Robert B. Zoellick.
El BM estima que los precios globales crecieron en un 15% entre octubre de 2010 y enero de 2011, llevándolos a precios un 29% mayores que hace un año, y solamente un 3% por debajo del techo que alcanzaron en 2008, según un comunicado de prensa emitido por el organismo multilateral.
“Los alimentos representan una gran proporción cada vez más inestable del presupuesto de las familias pobres y urbanas. Cuando el precio de los alimentos básicos aumenta, los más afectados son los países y las personas pobres", expresó Zoellick, quien añadió que "el aumento de precios ya está empujando a millones de personas a la pobreza y castigando a los más vulnerables, que gastan más de la mitad de sus ingresos en comida".
Hay casi 1.000 millones de personas que sufren hambre en todo el mundo y más del 60% son mujeres. Cuando deben afrontar el alto precio de los alimentos, los hogares pobres eligen los más baratos, los menos nutritivos y (o) dejan de utilizar los servicios de salud y educación, explica el comunicado del BM.
Según el BM, el incremento de costos causa mayor desnutrición entre los más desposeídos, que tienden a consumir alimentos más baratos y menos nutritivos.
La cifra de nuevos pobres no ha superado los 44 millones de personas debido a que las buenas cosechas africanas han evitado un aumento mayor de los costos, y también porque los aumentos en el costo global del arroz han sido moderados.
La malnutrición contribuye a que se enfermen bebés, niños y madres, a que se reduzca la capacidad de aprendizaje y la productividad y a que aumente la mortalidad. Un tercio de todas las muertes infantiles mundiales se atribuye a la desnutrición.
En la agenda del G20
La próxima semana tendrá lugar la reunión del Grupo de los 20 (G20), para la que el presidente Zoellick pidió a los países que integran dicho conglomerado que "dieran prioridad a los alimentos" y reclamó medidas para garantizar que las personas y los países vulnerables tengan acceso a comidas nutritivas.
El BM ha destinado $1.500 millones de dólares a su Programa de Respuesta Global a la Crisis Alimentaria (GFRP por sus siglas en inglés) que busca asistir a 40 millones de personas, y ha brindado ayuda agroindustrial a 40 países de bajos ingresos.