Ante la revelación que hizo la guerrilla colombiana de las Farc este miércoles con los nombres de tres de los seis secuestrados que ofrecieron liberar, el gobierno de Colombia reaccionó con gran indignación.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, quién fue delegado por el presidente para encargarse de este asunto exigió al grupo guerrillero la liberación inmediata de todos los secuestrados que retienen encadenados en las selvas y no solo a seis.
"Nosotros estamos dispuestos. Si nos llaman podemos ir hoy mismo por los secuestrados", afirmó el ministro a los medios de comunicación y manifestó su preocupación de que estos secuestrados sean utilizados como "mercancía política".
El ministro Pinzón, que se encontraba reunido en la capital del país con su homólogo peruano, Alberto Otrola, criticó la forma en que las FARC continúan manejando las liberaciones de policías y militares retenidos desde hace cerca de 14 años.
"Esto requiere la voluntad de liberar a las personas y entregarlos a sus familias", sentenció.
De acuerdo al comunicado de las FARC, leído por el jefe guerrillero conocido como Iván Márquez, los tres uniformados que liberarán son el sargento del Ejército Luis Beltrán Franco, el sargento de la Policía César Augusto Lasso y el intendente de la policía Carlos Duarte Rojas.
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Estos nombres se suman a los del cabo primero José Libardo Forero Carrero y los subintendentes de la Policía, Jorge Trujillo Solarte y Jorge Humberto Romero que también serán liberados, según anunciaron las FARC en diciembre.