Organizaciones y entidades internacionales tienen los ojos puestos en Guatemala y el ejercicio de la libertad de prensa argumentando que, en el primer año de administración del presidente Alejandro Giammattei, se ha atacado a los medios de comunicación, se ha restringido el acceso a la información y se registran pocos avances en las investigaciones sobre amenazas a periodistas.
El tema surgió la semana pasada desde la Organización No Gubernamental Human Rights Watch y del Comité para la Protección de Periodistas quienes emitieron un comunicado.
La Voz de América buscó la postura del gobierno y consultó con la Secretaria de Comunicación de la Presidencia, Patricia Letona, quien manifestó que no emitirían un pronunciamiento oficial al respecto.
En tanto, Miguel Ángel Albizures, integrante de la Asociación de Periodistas de Guatemala, solicitó que los funcionarios respeten la Constitución de la República que garantiza el derecho a la libre expresión, pidiendo “el respeto irrestricto al derecho de los periodistas a poder informar y analizar la situación en que se dan los hechos”.
Albizures insiste en que debe darse seguimiento a las denuncias presentadas por periodistas ante el Ministerio Público, exigiendo la investigación de los casos, el respeto a la vida y el respeto a la libre expresión.
Para el analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales -ASIES-, Jahir Dabroy, esto no es un problema nuevo, pero advierte que la libertad de prensa debe respetarse en todo momento.
“Es un problema que se ha venido repitiendo en diferentes gobiernos y tiene relación directa con una labor natural que realiza la prensa que es la fiscalización de la labor gubernamental y eso obviamente no gusta a muchos actores del gobierno. No podemos llegar a una situación límite donde se vede el acceso a la prensa y donde puedan existir riesgos a la integridad de los periodistas” declaró.
Dabroy resalta que la falta de acceso a información repercute en que fuentes no confiables de información se aprovechen y puedan sustituir a los medios legítimamente inscritos que tienen un nivel de confiabilidad en la población guatemalteca y agregó que es “sumamente relevante contar con el acceso a fuentes para los diferentes medios de comunicación porque son la base de una información fidedigna de la situación que se está viviendo en las diferentes instancias gubernamentales y que va a repercutir en la actividad social, económica y política del país”.
Solo en 2020, la Asociación de Periodistas de Guatemala registró más de 149 agresiones o restricciones de información a periodistas, comparado con 85 casos en 2019.