Como una victoria calificó la familia de Berta Cáceres la sentencia interpuesta para el empresario David Castillo de ser coautor del homicidio de la ambientalista hondureña y señalaron que esto es un avance importante y un mensaje claro contra la impunidad.
Laura Zuniga, una de las hijas de la ambientalista aseguro que el proceso sigue en marcha, hoy demandan capturar a más involucrados y que la defensa ambiental y social persiste en los grupos campesinos.
“Esperemos que Honduras sea un país menos impune, ya que hemos logrado un fallo de culpabilidad contra una persona que ha tenido poder y que esto inicie más procesos de justicia”, aseguró Zuniga.
Cáceres se oponía a los planes de la empresa que presidía Castillo, Desarrollos Energéticos S.A. (DESA), de construir una represa hidroeléctrica en el río Gualcarque y en terrenos de la comunidad Lenca a la que Cáceres pertenecía. Mientras tanto, otros siete imputados guardan prisión por la muerte de la ambientalista.
Por su parte, Yuri Mora, portavoz del Ministerio Público, dijo que el caso sigue su curso, se está investigando más a fondo ya que el caso, pese a conocer otra sentencia, no está cerrado.
“Los fiscales continúan trabajando en busca de si hay o no más autores intelectuales de este asesinato”, señaló el portavoz.
Castillo, quien fue presidente ejecutivo de DESA, es la octava persona condenada por la muerte de Cáceres, ocurrida en la ciudad de La Esperanza, departamento de Intibucá.
Berta Cáceres fue asesinada a tiros el 2 de marzo de 2016 en su lugar de residencia a unos 200 km de Tegucigalpa.