Las autoridades de salud de Estados Unidos han emitido una advertencia de viaje debido al creciente número de casos de lepra, también conocida como enfermedad de Hansen, en la región de Florida Central.
Según datos de un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), Florida Central ha experimentado un aumento significativo de los casos de lepra.
En esta región se han dado 81 % en los casos reportados en el estado, representando casi una quinta parte de todos los casos reportados en el país.
“Cada vez que la [los] CDC nota el aumento del diagnóstico de casos, los médicos tenemos que estar alerta porque, a veces, este tipo de enfermedades no son fáciles de detectar y se pueden confundir con muchas otras enfermedades como el lupus o problemas simples de la piel”, comenta el Dr. Carlos Riveros, que tiene consulta médica en el sur de la Florida.
Sobre eso, señala que “el diagnóstico temprano se hace fundamental” para aplacar el contagio de esta enfermedad, “pero para eso hay que sospecharlo”. “Por eso, estas alertas se vuelven importantes y es un arma importante que tenemos los médicos para poner sobre la mesa este tipo de enfermedades que se vuelven indetectables hasta que han avanzado mucho”, dice.
La lepra alcanzó su punto máximo en EEUU en los 80
Este inquietante aumento contrasta con la historia de la lepra en Estados Unidos, donde históricamente ha sido poco común. En la década de los ochenta, la incidencia alcanzó su punto máximo y desde entonces se produjo una reducción drástica en el número anual de casos documentados. Sin embargo, los informes más recientes demuestran que la incidencia de la lepra ha estado en aumento gradual en todo el país, duplicándose en los estados del sureste durante la última década.
Lo más preocupante es que varios de los casos registrados en Florida Central no muestran evidencia clara de exposición zoonótica o factores de riesgo conocidos para la transmisión de la enfermedad. Incluso se ha informado de un caso de lepra lepromatosa en un hombre residente del área sin factores de riesgo identificables.
¿Qué es la lepra?
La lepra es una enfermedad infecciosa crónica que afecta principalmente la piel y el sistema nervioso periférico del paciente. Se transmite a través de un contacto cercano y prolongado con un paciente no tratado.
“La lepra es una enfermedad producida por una microbacteria que puede penetrar, generalmente, a través de las vías respiratorias o aperturas en la piel”, comenta el Dr. Riveros aclarando que, en un principio, “no es muy contagiosa”.
A partir de ahí, la enfermedad afecta a “otras partes del organismo” y “va produciendo algunas reacciones” en el cuerpo.
¿Qué síntomas hay cuando alguien tiene la lepra?
Los síntomas conocidos de la lepra incluyen la aparición de manchas descoloridas en la piel, engrosamiento y sequedad cutánea, crecimientos en la piel, pérdida de cejas y pestañas, debilidad muscular o parálisis y agrandamiento de los nervios.
“Aparecen lesiones en la piel que son como redondas, amplias, se ven como un poco pálidas pero enrojecidas en alguna parte. Se vuelven crónica y se pueden confundir fácilmente con cualquier otra cosa porque uno no podría sospechar que tiene una lepra”, agrega el especialista consultado por VOA, mientras advierte que “también puede generar algunos problemas en los nervios periféricos”, como una neuropatía.
Y es que si no se trata a tiempo, la enfermedad puede llevar a complicaciones graves como ceguera, úlceras en la planta de los pies y parálisis o deformidades en las extremidades.
Sólo 150 casos en EEUU
A nivel mundial, la Organización Mundial de la Salud (OMS, en inglés) registra más de 200.000 casos de lepra cada año en más de 120 países. En Estados Unidos, los CDC informan que aproximadamente 150 personas se infectan con la enfermedad anualmente.
Aunque no hay motivos de preocupación, las autoridades de salud en Florida Central están instando a la población a estar atenta a cualquier síntoma sospechoso y a buscar atención médica de inmediato en caso de presentarlos. Se enfatiza la importancia de la detección temprana y el tratamiento oportuno para evitar complicaciones graves asociadas con la lepra.
Además, se están llevando a cabo investigaciones exhaustivas para identificar las razones detrás del aumento de casos y comprender mejor los factores de riesgo involucrados en la propagación de la enfermedad. La colaboración entre las autoridades de salud, los profesionales médicos y la comunidad es esencial para controlar y prevenir la propagación de la lepra en la región.
En última instancia, la conciencia pública y la educación sobre la lepra son fundamentales para eliminar el estigma asociado con esta enfermedad y garantizar que aquellos afectados reciban el tratamiento y el apoyo adecuados para vivir una vida saludable y plena.
¿Quiénes son las personas de riesgo?
Los pacientes de riesgo serían las personas mayores y aquellas con enfermedades crónicas. También “los niños, de entre los 5 y 10 años, que podrían tener en su sistema inmune alguna deficiencia que pueda hacer que la microbacteria pueda avanzar en el organismo”.
Las autoridades sanitarias recuerdan que la lucha contra la lepra requiere el esfuerzo conjunto de toda la sociedad para erradicar esta enfermedad y proteger la salud de la población.
Los médicos recomiendan llevar una higiene óptima y poner en marcha los mismos protocolos que se llevaron a cabo durante la pandemia del coronavirus.
“Recomendamos hacer algo parecido a lo que hemos hecho con todas las enfermedades infecciosas: el lavado de las manos, evitar el contacto respiratorio con personas que potencialmente podrían estar enfermas, el mantener cierta distancia. Todo esto se vuelve muy importante”, zanja el Dr. Riveros.
