Los mecánicos que trabajan en un avión en el aeropuerto de Atlanta, Georgia, pasaron un susto cuando al intentar probar los motores de un Boeing 737 de Delta Airlines, este martes 13 de marzo, descubrieron que el avión no tenía frenos.
La nave sin pasajeros y solo con los mecánicos a bordo, continuó rodando por la pista, atravesándola hasta caer en un terraplén donde finalmente se detuvo.
Un vocero de Delta Airlines dijo que ninguno de los mecánicos resultó herido. El avión sin embargo sufrió daños significativos.