El fundador de WikiLeaks, Julian Aasange, dijo este jueves estar abierto a negociaciones que pongan fin a su ya larga estancia de seis meses en la embajada de Ecuador en Londres, donde halló refugio para no ser extraditado a Suecia por las autoridades británicas.
En declaraciones a la prensa desde el pequeño balcón de la sede diplomática ecuatoriana, indicó estar dispuesto a permanecer donde está mientras se sienta amenazado por EE.UU.
Con todo, dijo que Wikileaks difundirá el año entrante más de un millón de documentos con información clasificada que afectarán a todos los países del mundo.
“No obstante, la puerta está abierta, y siempre lo ha estado, para cualquiera que desee emplear procedimientos normales para hablarme o garantizarme una salida segura”, señaló.
Según Assange, mientras siga siendo investigado de manera “inmoral” y el gobierno de Australia (su país) no defienda el periodismo y la publicación de WikiLeaks “debo permanecer aquí”.
Aunque el Departamento de Justicia en Washington abrió una investigación sobre la filtración a WikiLeaks de documentos militares y diplomáticos estadounidenses, Assange es reclamado por la justicia en Suecia, donde enfrenta acusaciones por agresión sexual.
El australiano dice temer que si es extraditado a Suecia, terminará siendo enviado a EE.UU. para ser juzgado por la filtración de esos documentos secretos.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, concedió asilo diplomático en agosto pasado a Assange, que no ha podido salir de la embajada porque las autoridades británicas dicen tener la obligación de extraditarlo y han asegurado que de hacerlo sería arrestado.
En declaraciones a la prensa desde el pequeño balcón de la sede diplomática ecuatoriana, indicó estar dispuesto a permanecer donde está mientras se sienta amenazado por EE.UU.
Con todo, dijo que Wikileaks difundirá el año entrante más de un millón de documentos con información clasificada que afectarán a todos los países del mundo.
“No obstante, la puerta está abierta, y siempre lo ha estado, para cualquiera que desee emplear procedimientos normales para hablarme o garantizarme una salida segura”, señaló.
Según Assange, mientras siga siendo investigado de manera “inmoral” y el gobierno de Australia (su país) no defienda el periodismo y la publicación de WikiLeaks “debo permanecer aquí”.
Aunque el Departamento de Justicia en Washington abrió una investigación sobre la filtración a WikiLeaks de documentos militares y diplomáticos estadounidenses, Assange es reclamado por la justicia en Suecia, donde enfrenta acusaciones por agresión sexual.
El australiano dice temer que si es extraditado a Suecia, terminará siendo enviado a EE.UU. para ser juzgado por la filtración de esos documentos secretos.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, concedió asilo diplomático en agosto pasado a Assange, que no ha podido salir de la embajada porque las autoridades británicas dicen tener la obligación de extraditarlo y han asegurado que de hacerlo sería arrestado.