Políticos italianos tratan de buscar la manera de contener una ola de inmigrantes ilegales africanos, mientras socorristas continúan buscando a otros que desaparecieron cuando cruzaban el Mar Mediterráneo hace pocos días.
El ministro de Transporte de Italia, Alessandro Bianchi, dijo este lunes que su Departamento necesita urgentemente unos 13 millones de dólares adicionales casi diarios para los esfuerzos de rescate del Servicio de Guardacostas.
Bianchi pidió una acción coherente, fuerte y decisiva de la Unión Europea sobre el tema.
Por lo menos 40 personas desembarcaron este lunes en Lampedusa y otras islas italianas ubicadas entre África y Europa. Decenas han muerto ahogados en días recientes.
Desde comienzos de año, cerca de 10 mil inmigrantes han cruzado las peligrosas aguas entre Libia y las islas italianas al sur de Sicilia.