El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, permanecerá detenido sin derecho a fianza hasta la siguiente audiencia judicial relacionada con los cargos en su contra por presunto intento de violación y otros delitos, anunció un juez en la ciudad de Nueva York.
Strauss-Kahn podría pasar hasta 25 años en prisión si se demuestran los cargos de asalto sexual, intento de violación y restricción de libertad a una mucama que entró a limpiar su suite en un hotel de lujo cerca de Times Square.
Los abogados de Strauss-Kahn dijeron que su cliente "rechaza todos los cargos en su contra" y ha aceptado someterse a un examen forense.
Según la policía de Nueva York, una empleada de un lujoso hotel donde se hospedaba Strauss-Kahn dijo que este intentó violarla el sábado 14 de mayo de 2011.
La denuncia fue presentada por una mucama del lujoso hotel Sofitel, en el centro de Manhattan, quien dijo que había ingresado a limpiar la habitación tal como le fue ordenado, el sábado después del mediodía tal como le fue ordenado.
La mucama declaro a la policía que Strauss-Kahn salió del baño desnudo e intentó forzarla a tener relaciones sexuales, la persiguió por el pasillo y la arrastró hasta el baño. La mucama dijo que pudo escapar y tras salir de la habitación, habló con otros empleados de hotel, quienes llamaron a la policía.
Mientras tanto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) informó que la institución se mantiene en funciones y completamente operativa, y no hizo comentarios adicionales.
Otras acusaciones
El abogado de la escritora francesa Tristane Banon dijo que ella también está considerando presentar una demanda legal contra Strauss-Kahn, al cual acusa de haberla atacado sexualmente en 2002.
El director gerente del FMI, está casado con una importante periodista de televisión francesa, tiene cuatro hijos y ha estado involucrado en otro escándalo sexual.
En 2008, Dominique Strauss-Kahn, tuvo que disculparse por lo que definió como “un error de juicio", tras sostener un romance con una de sus asistentes.
Golpe político
Las repercusiones fueron inmediatas en Francia, donde Strauss-Kahn es considerado el favorito para ser el candidato a presidente por el opositor Partido Socialista, en las elecciones de 2012, frente a la candidatura a la reelección del actual presidente, Nicolas Sarkozy.
La presidenta del Partido Socialista, Martine Aubry, apeló a la unidad del partido frente a la noticia que según dijo los “golpeó como un rayo”. Otros definieron al arresto y sus posibles consecuencias como "un tsunami político".
Por otra parte, su rival dentro del partido Socialista, Segolene Royal, hizo un llamado a la prudencia y solicitó que se aguarde a los resultados de una investigación que se abrió por el caso.
El aliado de Strauss-Kahn, Jean-Marie Le Guen, aseveró que la acusación por agresión sexual no sonaba como algo creíble en Strauss-Khan e incluso sugirió que el director gerente del FMI podría ser sujeto de una campaña sucia en su contra.
Según expertos, de ser verdaderas las acusaciones, sería muy difícil para Strauss-Kahn poder relanzar su carrera política.
