El Congreso argentino aprobó una ley que prohíbe la publicidad del tabaco y fumar en lugares públicos.
Tras años de debate, el Congreso aprobó por mayoría la ley el que impone la prohibición a los anuncios publicitarios de tabaco y restringe las zonas de fumadores, pese a la fuerte oposición de la industria tabacalera.
“Me parece que está bien que prohíban en lugares como restaurantes, donde la gente está comiendo y el humo molesta. Pero a veces priorizan también a los no fumadores, y limitan mucho a los que fuman. Lo que está bien es que pongan sectores de fumadores y no fumadores, eso me parece mejor que prohibir totalmente. Pero en lugares públicos, como los hospitales, me parece que está bien porque era irónico que se deje fumar allí, hay que priorizar la salud”, cuenta Magalí, fumadora de 23 años.
La ley exige además que los fabricantes impriman advertencias sobre los daños a la salud en todos los paquetes de cigarrillos, igual a cómo se hace ya en otros países como España.
“Las etiquetas, como lo hacen en Brasil, no modifica nada, porque la gente va a seguir fumando, tendría que tratar de equiparar los derechos”, señala Magalí, que también hace referencia a otras medidas como el aumento del coste del paquete, que considera que no tendría efectos. “El que fuma por más que sea cara va a seguir fumando igual”.
Otros, como Agustín, coinciden en que las medidas que se implementen para reducir el consumo de tabaco "no deberían limitar la posibilidad a los fumadores de fumar", aunque considera que esta medida en concreto es "positiva".
El ministro de Salud, Juan Manzur, aplaudió la acción legislativa que concede “al fín” a Argentina legislación que controle el consumo del tabaco.El gobierno argentino estima que unos 8 millones de personas fuman, cerca de una tercera parte de la población adulta.
Las enfermedades relacionadas con el uso del tabaco han contribuido a aumentar el número de muertos hasta 40 mil personas al año.
La intervención del Congreso se produce un día después de que una medida similar entrara en vigor en Venezuela con importantes multas y sanciones como el cierre temporal de establecimientos a quienes no cumplan con la regulación.
En este país, el gobierno concedió 90 días a locales, instituciones públicas y privadas, comercios y discotecas para informar sobre la nueva norma de salud pública.
Los dos países se alinean con esta medida a los requisitos exigidos por el convenio de la Organización Mundial de la Salud, lista a la que pertenecen países como Colombia, Perú, Nicaragua, Honduras, Uruguay y México que tienen leyes similares dirigidas a reducir el consumo del tabaco.
En 2006, Uruguay se convirtió en el primer país Latinoamericano en prohibir el fumar en lugares públicos y varias otras naciones en la región comenzaron a seguir sus pasos.