La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió el jueves diálogo entre los agentes políticos en Haití y pidió que se respeten los “plazos” y mecanismos constitucionales del país caribeño, envuelto en una profunda crisis institucional.
Haití se ha visto asolado por las protestas e inestabilidad en las últimas semanas, después de que un grupo de opositores intentara declarar un gobierno paralelo, apoyados en el argumento de que el término del presidente Jovenel Moïse llegó a su fin a principios de febrero.
Unos días antes, el gobierno había arrestado a 23 personas, incluyendo un juez de la Corte Suprema, acusándolos de planear asesinar a Moïse y llevar a cabo golpe de estado. El presidente, de 52 años, se ha negado a retirarse del poder, alegando que un gobierno interino estuvo en pie durante el primer año de su mandato.
Al ser preguntado sobre las denuncias de intento de golpe de estado del gobierno haitiano, el comisionado de la CIDH para Haití, dijo a la Voz de América que el organismo califica lo ocurrido como un “intento de interrupción de un periodo constitucional que está todavía vigente”. El gobierno de Estados Unidos también apoya el argumento de Moïse sobre el vencimiento de su mandato en 2022 y ha pedido elecciones legislativas
La CIDH, dijo a la VOA el comisionado Stuardo Ralón, pide que “se respeten los plazos constitucionales (…) y que se priorice el diálogo de todos los actores”.
Después del supuesto intento de golpe de estado, Moïse decidió retirar a tres jueces de la Corte Suprema, una decisión que tanto la ONU como organizaciones de derechos humanos han criticado. En un comunicado, Humans Right Watch, calificó la destitución de los jueces de una violación a la constitución del país.
La ONU alertó de la posibilidad de represión violenta a las manifestaciones convocadas por la oposición en el país, señalado un “patrón de violencia” por parte de las fuerzas del estado en años pasados. El organismo ha denunciado ataques y amenazas contra periodistas, líderes sociales en el país.
El comisionado Ralón pidió al gobierno haitiano que se “respete el legítimo derecho a manifestar y que no se utilice en forma desproporcionada la fuerza”. En noviembre, el gobierno de Moïse pasó un decreto ampliando la definición de terrorismo para incluir vandalismo y obstrucción de calles, de acuerdo con la Oficina Integrada de la ONU para Haití.