La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) difundió una declaración en la que expresa que este año que termina se presentaron “varias” situaciones que ocuparon su atención por considerarlas “feroces ofensivas oficiales que buscaban acallar al periodismo independiente”.
En un balance del año, la SIP dice haber sido testigo "de múltiples acciones contra el periodismo independiente” en Ecuador y recuerda el caso del diario El Universo.
“Este ha sido uno de los graves problemas que la prensa independiente ha debido enfrentar por parte del gobierno de Rafael Correa”, dice la declaración.
Y continúa: “En Argentina constatamos que existen serios obstáculos que frenan el ejercicio del periodismo libre, cuya crítica y fiscalización no satisface al oficialismo. Un ejemplo fue la intensa campaña pública del gobierno y de presión a magistrados para forzar una decisión a tono con sus intereses sobre la discusión de dos artículos de la Ley de Medios, cuya constitucionalidad impugnó el Grupo Clarín”.
En cuanto a la violencia contra los periodistas, la SIP precisa que hay casos muy delicados y de honda preocupación.
“Este año fueron asesinados 19 periodistas, siete en México, seis en Brasil, cuatro en Honduras, uno en Ecuador y uno en Haití. Otros cuatro periodistas mexicanos están desaparecidos”, señala.
“Persistieron, agrega la SIP, también durante el año campañas sistemáticas contra el periodismo independiente en Argentina, Ecuador y Venezuela, que se manifestaron a través de leyes regulatorias, discriminación en la distribución de la publicidad oficial y la utilización de medios estatales y privados afines para difamar y desprestigiar a la prensa independiente”.
La SIP dedica especial atención a Cuba, donde se han elevado las acciones de represión contra periodistas independientes y opositores, y se registraron alrededor de 1.843 detenciones breves entre abril y noviembre de este año, según datos de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.
Finaliza advirtiendo que hay gran incertidumbre de que las reformas que discute la Organización de los Estados Americanos (OEA), para modificar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, pueden debilitar el trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y de su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de esa organización.
En un balance del año, la SIP dice haber sido testigo "de múltiples acciones contra el periodismo independiente” en Ecuador y recuerda el caso del diario El Universo.
“Este ha sido uno de los graves problemas que la prensa independiente ha debido enfrentar por parte del gobierno de Rafael Correa”, dice la declaración.
Y continúa: “En Argentina constatamos que existen serios obstáculos que frenan el ejercicio del periodismo libre, cuya crítica y fiscalización no satisface al oficialismo. Un ejemplo fue la intensa campaña pública del gobierno y de presión a magistrados para forzar una decisión a tono con sus intereses sobre la discusión de dos artículos de la Ley de Medios, cuya constitucionalidad impugnó el Grupo Clarín”.
En cuanto a la violencia contra los periodistas, la SIP precisa que hay casos muy delicados y de honda preocupación.
“Este año fueron asesinados 19 periodistas, siete en México, seis en Brasil, cuatro en Honduras, uno en Ecuador y uno en Haití. Otros cuatro periodistas mexicanos están desaparecidos”, señala.
“Persistieron, agrega la SIP, también durante el año campañas sistemáticas contra el periodismo independiente en Argentina, Ecuador y Venezuela, que se manifestaron a través de leyes regulatorias, discriminación en la distribución de la publicidad oficial y la utilización de medios estatales y privados afines para difamar y desprestigiar a la prensa independiente”.
La SIP dedica especial atención a Cuba, donde se han elevado las acciones de represión contra periodistas independientes y opositores, y se registraron alrededor de 1.843 detenciones breves entre abril y noviembre de este año, según datos de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.
Finaliza advirtiendo que hay gran incertidumbre de que las reformas que discute la Organización de los Estados Americanos (OEA), para modificar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, pueden debilitar el trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y de su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de esa organización.