En la instalación de la cumbre, el Rey Juan Carlos, dijo que el continente crece, se reducen los índices de pobreza y hay una mayor cohesión social.
"De este lado del Atlántico hemos visto en los últimos años surgir situaciones difíciles causadas por la crisis económica y financiera. Nuestras miradas se vuelven ahora hacia vosotros", expresó el monarca español, en un mensaje directo a los jefes de estado latinoamericanos.
"Habéis hecho un esfuerzo extraordinario para estar hoy donde estáis y no podemos sino reconocerlo y buscar una experiencia que podamos compartir", añadió.
El Teatro Falla de Cádiz es la sede principal de la ceremonia de inauguración de la XXII Conferencia Iberoamericana, que se celebra con el objetivo principal de que los líderes de América Latina, España, Andorra y Portugal evalúen la situación económica mundial y busquen de forma conjunta salidas a la crisis.
Antes de la inauguración oficial de la XXII Cumbre Iberoamericana, el Rey recibió en audiencia a los presidentes de Colombia y Ecuador, Juan Manuel Santos y Rafael Correa.
La cita, que España acoge por primera vez desde 2005, aspira a dar un nuevo impulso a este foro, creado a iniciativa de España y México en 1991, y que ha ido perdiendo interés entre sus miembros, como refleja el alto nivel de ausencias registrado en algunas de sus últimas ediciones.
El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos,(OEA) José Miguel Insulza, asiste como invitado especial y en el marco de la cumbre se entrevistó con la vicepresidenta de España, Soraya Sáenz de Santamaría,
El presidente de Bolivia, Evo Morales, suspendió en el último momento su reunión bilateral con Mariano Rajoy, debido a una "leve indisposición". Fuentes de La Moncloa aseguraron que Morales canceló así el encuentro que tenía previsto con el presidente español a las cinco de la tarde, poco antes de que comience oficialmente la cumbre de Cádiz.
A lo largo de la jornada, Rajoy ha mantenido varias reuniones bilaterales con el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos; con el de Ecuador, Rafael Correa; con el de Honduras, Porfirio Lobo; y con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
La baja de última hora del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, eleva a siete el número de líderes iberoamericanos que estarán ausentes en la Cumbre de Cádiz.
Además faltan a la cita los presidentes de Cuba, Raúl Castro -que nunca ha acudido a estas reuniones- Venezuela (Hugo Chávez); Argentina (Cristina Fernández de Kirchner), y Uruguay, (José Mujica) -ambos alegan motivos de salud.
Tampoco asistió el de Guatemala (Otto Pérez-Molina), por el reciente terremoto que ha afectado a su país, y Paraguay (Federico Franco), que se excluyó por el conflicto que mantiene con sus vecinos sudamericanos, que no reconocen como legítimo su gobierno tras la destitución de Fernando Lugo.
"De este lado del Atlántico hemos visto en los últimos años surgir situaciones difíciles causadas por la crisis económica y financiera. Nuestras miradas se vuelven ahora hacia vosotros", expresó el monarca español, en un mensaje directo a los jefes de estado latinoamericanos.
"Habéis hecho un esfuerzo extraordinario para estar hoy donde estáis y no podemos sino reconocerlo y buscar una experiencia que podamos compartir", añadió.
El Teatro Falla de Cádiz es la sede principal de la ceremonia de inauguración de la XXII Conferencia Iberoamericana, que se celebra con el objetivo principal de que los líderes de América Latina, España, Andorra y Portugal evalúen la situación económica mundial y busquen de forma conjunta salidas a la crisis.
Antes de la inauguración oficial de la XXII Cumbre Iberoamericana, el Rey recibió en audiencia a los presidentes de Colombia y Ecuador, Juan Manuel Santos y Rafael Correa.
La cita, que España acoge por primera vez desde 2005, aspira a dar un nuevo impulso a este foro, creado a iniciativa de España y México en 1991, y que ha ido perdiendo interés entre sus miembros, como refleja el alto nivel de ausencias registrado en algunas de sus últimas ediciones.
El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos,(OEA) José Miguel Insulza, asiste como invitado especial y en el marco de la cumbre se entrevistó con la vicepresidenta de España, Soraya Sáenz de Santamaría,
El presidente de Bolivia, Evo Morales, suspendió en el último momento su reunión bilateral con Mariano Rajoy, debido a una "leve indisposición". Fuentes de La Moncloa aseguraron que Morales canceló así el encuentro que tenía previsto con el presidente español a las cinco de la tarde, poco antes de que comience oficialmente la cumbre de Cádiz.
A lo largo de la jornada, Rajoy ha mantenido varias reuniones bilaterales con el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos; con el de Ecuador, Rafael Correa; con el de Honduras, Porfirio Lobo; y con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
La baja de última hora del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, eleva a siete el número de líderes iberoamericanos que estarán ausentes en la Cumbre de Cádiz.
Además faltan a la cita los presidentes de Cuba, Raúl Castro -que nunca ha acudido a estas reuniones- Venezuela (Hugo Chávez); Argentina (Cristina Fernández de Kirchner), y Uruguay, (José Mujica) -ambos alegan motivos de salud.
Tampoco asistió el de Guatemala (Otto Pérez-Molina), por el reciente terremoto que ha afectado a su país, y Paraguay (Federico Franco), que se excluyó por el conflicto que mantiene con sus vecinos sudamericanos, que no reconocen como legítimo su gobierno tras la destitución de Fernando Lugo.