El abogado Michael Avenatti -que saltó a la fama por haber representado a la actriz porno Stormy Daniels en demandas contra el presidente Donald Trump- fue instruido de 36 cargos en California bajo una acusación federal, informaron el jueves los fiscales federales.
Las acusaciones alegan que robó millones de dólares a sus clientes, no pagó sus impuestos, cometió fraude bancario y mintió en procedimientos de bancarrota.
Avenatti, de 48 años, fue acusado el miércoles por la noche por un gran jurado del sur de California de una serie de cargos adicionales después de su arresto el mes pasado en Nueva York por dos cargos relacionados y por supuestamente tratar de extorsionar a la firma Nike por hasta 25 millones de dólares.
El abogado dijo el jueves en Twitter que se declarará inocente de los cargos de California. "Espero que se conozca toda la verdad, en vez de una versión unilateral que pretende marginarme", escribió.
Los nuevos cargos no incluyen el caso de extorsión en Nueva York que sostiene que Avenatti exigió millones de dólares para abstenerse de hacer afirmaciones que planeaba revelar sobre un supuesto pago de Nike a jugadores de secundaria. Avenatti ha dicho que espera ser absuelto en ese caso.
La acusación de 61 páginas en el sur de California alega que Avenatti desfalcó a un hombre parapléjico y a otros cuatro clientes y los engañó mezclando dinero entre cuentas para pagar pequeñas porciones de lo que debían para hacerles creer que se les estaba pagando.
Avenatti también fue acusado de no pagar impuestos sobre su renta personal, no pagar impuestos por varios de sus negocios, entre ellos dos bufetes de abogados, y de embolsarse los impuestos sobre la nómina de la cadena de café Tully's Coffee que era de su propiedad, agregó la acusación.
Los cargos son el golpe más reciente a una carrera que despegó el año pasado cuando Avenatti representó a Daniels en su demanda para romper un acuerdo de confidencialidad con Trump para permanecer callada sobre un amorío que supuestamente tenían.
Avenatti se convirtió en uno de los principales adversarios de Trump, atacándolo en programas de noticias por cable y Twitter. En un momento dado, Avenatti incluso consideró desafiar a Trump en las elecciones presidenciales de 2020.
Sin embargo, en su propio terreno, en California, sus prácticas comerciales eran objeto de escrutinio por el IRS y por un exsocio legal al que Avenatti y el bufete Eagan Avenatti , que se declaró en bancarrota, le debían 14 millones de dólares.