Según un informe de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el 48,6 % de los niños, niñas y adolescentes no acompañados que huyen de Centroamérica hacia EE.UU. o México escapan de la violencia.
El informe "Arrancados de raíz", que ACNUR presentó en México, establece que la violencia que obliga a migrar a los jóvenes es de diferentes tipos.
El reporte señaló que unos 48.000 menores fueron detectados entre octubre de 2013 y julio de este año; con 55,5 % de ellos varones.
Los menores hombres sufren más "amenazas, inseguridad e intimidaciones" que usualmente se refieren a posibles reclutamientos de “grupos de delincuencia", según el responsable del informe, Abbdel Camargo.
En cuanto a las menores mujeres, ellas sufren más “golpes y maltratos", lo que puede deberse a violencia de género o doméstica.
Aparte de la violencia, los menores emigran por razones económicas (29,2%), o para una futura reunificación familiar (22,2%).
El 20% de todos los menores que emigran buscan radicarse en México, según Camargo.