Los accesos a la Ciudad Vieja de Jerusalén, que permiten acceder al barrio árabe y a la Explanada de las Mezquitas, fueron fuertemente restringidos el viernes por la policía de fronteras de Israel.
Vayas metálicas y decenas de efectivos impedían el paso a puertas milenarias como la de Damasco, la de Herodes o la de Los Leones.
El viernes es el principal día de oración para los árabes. Usualmente, ese día rezan en la Explanada de las Mezquitas miles de fieles musulmanes, principalmente palestinos residentes en Jerusalén Este. La Explanada está ubicada en el corazón de la Ciudad Santa, y se trata de un complejo conformado por la mezquita de Al Aqsa y el Domo de la Roca y está considerado el tercer lugar más sagrado del mundo islámico.
Pero eso no ocurre desde que comenzó el conflicto entre Israel y Hamás. Menos desde que arreciaron los ataques aéreos contra el norte de Gaza o comenzó la invasión terrestre a la Franja. Ante estos hechos, Hamás ha llamado a los palestinos a convertir los viernes en “viernes de la ira”.
La respuesta israelí ha sido reforzar la seguridad al máximo, fundamentalmente en la Ciudad Vieja de Jerusalén, mayor foco de tensión de la ciudad.
En la Puerta de Damasco, principal acceso al barrio árabe de la amurallada Ciudad Vieja, efectivos de la policía de fronteras de Israel controlaban el acceso. Revisaban los documentos de los palestinos e incluso a algunos los inspeccionaban a fondo y a muchos les impedían el paso, fundamentalmente a los más jóvenes.
Las calles del barrio árabe estaban desiertas. La mayoría de los negocios estaban cerrados o vacíos y por las calles circulaban en grupos efectivos de la policía de fronteras de Israel.
La Ciudad Vieja de Jerusalén está ubicada en la mitad este de la urbe, que debió ser la capital de un Estado Palestino que nunca llegó a fundarse. En 1967, fue ocupada militarmente por Israel y en 1980 anexada unilateralmente para proclamarla la “capital única e indivisible” de Israel. Pero, en el lado oriental de la ciudad, viven más de 300.000 palestinos, la mayoría musulmanes, aunque también hay cristianos.
La Puerta de los Leones, posiblemente el acceso más usado por los palestinos para llegar a la Explanada de las Mezquitas, estaba blindada hoy por decenas de efectivos. Muy cerca de ella la policía tenía estacionado un camión cisterna con un cañón de agua para usar en caso de disturbios.
Desde que comenzó el conflicto el pasado 7 de octubre la violencia ha ido en aumento. Once palestinos murieron hoy viernes en enfrentamientos con tropas israelíes, uno de ellos un menor de 17 años, elevando la cifra de muertes a 146 -incluidos 42 menores de edad- desde que comenzaron los enfrentamientos entre Israel y Hamás.
El aumento de las incursiones de Israel en Cisjordania y la crudeza de los ataques, sumado al surgimiento de nuevas milicias palestinas han intensificado la violencia y multiplicado el número de muertes. En lo que va de año, han muerto en Cisjordania 354 palestinos y 35 israelíes, en su mayoría colonos.