Un fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos hace más difícil a inmigrantes requerir un estatus legal cuando hayan sido deportados, incluso, aún si la remoción fue errónea o injusta. El fallo afecta particularmente a aquellos que regresen al país de forma irregular, después de su expulsión. Informa Arnaldo Rojas, de la Voz de América, en Houston.