Moviendo la cola al compás de un coro de ladridos y aullidos, decenas de perros discapacitados recorren un camino rocoso como parte de su ejercicio diario. Sin embargo, la pandemia a causa del COVID-19 podría cerrar las puertas de este refugio que, con la ayuda de la comunidad, alimenta y cuida de cientos de perros en la provincia tailandesa de Chonburi.