Con una actuación como para honrar una extraordinaria carrera de 27 años, la banda de rock estadounidense, Bon Jovi, una de las más legendarias del rock moderno, llevó a la locura a los miles de fanáticos que desbordaron el Verizon Center el domingo 27 de febrero de 2010.
Liderados por su cantante, el rockero y activista Jon Bon Jovi, la banda colocó sobre el escenario un mezcla única.
Además del poder de las voces, el talento musical, el inmenso de carisma de su líder y el compromiso con causas sociales, el show tuvo el complemento indispensable de un público completamente afín, que cantó a coro sus más reconocidos éxitos y celebró a lo grande el talento de los músicos en los increíbles solos.
Al desafío respondieron Richie Sambora en la guitarra, David Bryan en los teclados, Tico Torres en la batería y el bajista Hugh McDonald.
Dos horas y cuarto de un estadio a lleno, donde nadie quería que el concierto terminara, por más que era un domingo por la noche y el lunes no perdonará la resaca.
Pero el show valió la pena y los Bon Jovi tras despedirse con una soberbia interpretación de “Bad Medicine”, regresaron para dejar otras tres canciones y al público aplaudiendo de pie.
Washington una vez más se rindió a la leyenda de la banda de Nueva Jersey y nadie pudo resistir cuando el propio Jon Bon Jovi decía “no se imaginan cuanto me gusta venir a la ciudad, amamos Washington”, ante el delirio del público.
Por supuesto que no faltó “It´s My life”, “Something to Believe In” y la canción que marcó el compromiso de Jon Bon Jovi con la reconstrucción de Nueva Orleans, “Who says you can´t go home?” (¿Quién dice que no podrás regresar a casa?)