Sin importar el mal clima y las protestas en algunas ciudades del país miles de personas salieron al galope la mañana del tradicional “Viernes negro” para aprovechar las ofertas y los descuentos de las tiendas comerciales.
Aunque algunas tiendas no experimentaron tanta afluencia de público durante el “Viernes negro” debido a que ofertaron y estuvieron abiertas desde la misma tarde o noche del Día de Acción de Gracias, las expectativas de ventas son muy alentadoras.
La National Retail Federation (Federación Nacional de Minoristas) prevé que las ventas crecerán un 4,1% este fin de semana largo a $ 611.900 millones de dólares y de ser así, sería su mayor incremento desde 2011.
El año pasado las ventas específicamente durante el “Viernes negro” sufrieron una caída de 13.2% a $ 9.74 mil millones de dólares, de acuerdo a la encuestadora ShopperTrack. Esto se debió a que las ofertas atacaron a los consumidores desde antes y después del “Viernes negro”.
Pero todavía es prematuro para asegurar qué es lo que ocurrirá durante este “Viernes negro” donde todavía hay miles de personas en las tiendas tratando de conseguir el ansiado televisor, teléfono inteligente, cámara digital a precios muy por debajo del que podrían encontrar en un día común.
Por otro lado, según el instituto de investigación de consumo de la Universidad Georgetown, 81% de consumidores comprarán en las tiendas y por internet, mientras un 12 por ciento planea hacer sus compras navideñas solo por internet.
El Viernes Negro representa en Estados Unidos el inicio de la temporada navideña y es considerado como un termómetro económico en vista que representa para muchos minoristas hasta un 20 por ciento de sus ventas anuales.
