La visita del expresidente Evo Morales a Cuba esta semana por motivos de salud no pasó inadvertida en Bolivia, donde sus movimientos y comentarios son observados por adversarios y simpatizantes, mientras su figura sigue ensombreciendo la política nacional.
La noticia fue informada el lunes por el presidente argentino, Alberto Fernández, y luego confirmada por un portavoz de Morales, quien dijo a la agencia Reuters que el expresidente hizo “un viaje no programado a Cuba por motivos de salud”.
Miembros de su partido, Movimiento Al Socialismo, MAS, consideraron que Morales tiene todos los derechos para hacer el viaje a pesar de su condición de asilado político en Argentina.
La exministra de Comunicación y militante del MAS, Marianela Paco, dijo que “de acuerdo al reglamento de la (agencia mundial de policía) Interpol o sus estatutos (…) no tiene restricción alguna para movilizarse”.
A pesar de que el portavoz de Morales dijo que “su retorno (a Argentina) está previsto para este fin de semana con el fin de cumplir la agenda programada", el expresidente y candidato a las nuevas elecciones de Bolivia Jorge “Tuto” Quiroga, piensa otra cosa.
Según Quiroga, el viaje no es fortuito y se trata de una excusa que responde a presiones políticas.
“Evo Morales es tóxico y Argentina tenía que escoger entre financiamiento internacional con apoyo de Europa, Estados Unidos y organismos y proteger a Evo Morales, comercio con Brasil o proteger a Evo Morales”, dijo Quiroga.
“Tiene que escoger gas en el invierno de mayo, junio, julio o Evo Morales (…) Está clara de que esa ha sido la decisión”, añadió.
La propia condición médica de Morales no fue revelada, pero en 2017 fue sometido en La Habana a una operación de la laringe en la que se le extirpó un tumor benigno de la cuerda vocal izquierda.
En su condición de refugiado desde Buenos Aires, Morales conduce la campaña de su partido para las elecciones generales de Bolivia del 3 de mayo.
El expresidente aspira a ser senador por el departamento de Cochabamba, pero el Tribunal Supremo Electoral de Bolivia desestimó su candidatura porque no cumple algunos requisitos.
