Es engañoso que sólo con una orden ejecutiva se pueda negar la ciudadanía estadounidense por nacimiento a los hijos e hijas de inmigrantes en situación irregular, como lo plantea el aspirante a la Casa Blanca y expresidente de EEUU, Donald Trump.
Expertos en materia legal y de migración estiman que en caso de que un presidente en funciones se proponga firmar una orden ejecutiva con la intención de eliminar la ciudadanía a hijos de extranjeros en situación migratoria irregular, esta sería inconstitucional y no tendría efectos, a menos de que se efectúe mediante una enmienda constitucional.
Dentro de sus propuestas como aspirante por tercera vez a la presidencia de Estados Unidos, el pasado 30 de mayo, Trump dijo:
“Como parte de mi plan para asegurar la frontera, en el primer día de mi nuevo mandato, firmaré una orden ejecutiva dejando en claro a las agencias federales que, según la interpretación correcta de la ley, en el futuro, los futuros hijos de inmigrantes ilegales no recibirán la ciudadanía estadounidense automáticamente”.
Este discurso fue transmitido en medios de comunicación y subido a la plataforma de videos Rumble, donde cuenta con 75.8000 vistas y supera los 400 comentarios.
A través de la plataforma Truth Social -una red social impulsada por el expresidente Trump-, se ha compartido más de 7.500 veces y tiene más de 23.3000 likes. Y en YouTube supera las 108.000 vistas.
Esta no es la primera ocasión que Donald Trump señala su intención de hacer una orden ejecutiva para eliminar la ciudadanía por nacimiento para hijos de extranjeros en situación irregular. Se consideró en 2018, 2019 y se especuló sobre ella en 2020, sin embargo, no se concretó.
Siendo presidente, en octubre de 2018, Trump en una entrevista exclusiva por Axios en HBO dijo que por medio de una orden ejecutiva quitaría el derecho a la ciudadanía a los bebés de no ciudadanos e inmigrantes en situación de irregularidad migratoria nacidos en suelo estadounidense.
Solo se logró emitir una regla en 2020 y ordenó al Departamento de Estado otorgar a los oficiales de visas la autoridad para negar este documento a mujeres que busca viajar embarazadas para dar a luz en EEUU.
En 2019 se le cuestionó también a Trump nuevamente por la orden ejecutiva que limitaría la ciudadanía por nacimiento y señaló que lo consideraba “muy en serio”. No obstante, no se concretó, siendo que en 2020 se especuló por la orden ejecutiva ya cuando Trump perdió la reelección.
Advertencias sobre inconstitucionalidad
Aunque existe la intención del expresidente Trump para negar por una orden ejecutiva la ciudadanía estadounidense a los futuros hijos de inmigrantes ilegales, expertos coinciden en que esta propuesta sería inconstitucional y no tendría efectos.
Hollie Webb, abogada por la Facultad de Derecho de la Universidad Washington and Lee en EEUU, quien supervisa el Proyecto de Derechos Fronterizos de Al Otro Lado, una organización que brinda apoyo legal y humanitario a refugiados, deportados y migrantes en Estados Unidos, dijo a la Voz de América que la propuesta de Donald Trump “sería inconstitucional” y negó que pueda funcionar.
“Una orden ejecutiva no puede cambiar la constitución, y la ciudadanía por derecho de nacimiento es una disposición de la constitución estadounidense. Esta disposición (14 Enmienda) dice que “todas las personas nacidas” en los Estados Unidos son ciudadanos. No dice solo las personas cuyos padres son ciudadanos. El texto no es confuso”, explicó la experta en temas legales de migración.
La experta en materia legal de migración agregó que “Trump sabe que no puede poner fin a la ciudadanía por derecho de nacimiento a través de una orden ejecutiva, pero ese no es el punto: Trump solo quiere generar más enojo y miedo contra los inmigrantes porque eso lo ayuda a obtener votos”.
En 2018, el sitio digital Vox, una iniciativa en la que intervienen unos 100 periodistas y expertos dedicados a la investigación, información y producción de artículos, videos y podcasts para garantizar el acceso a información precisa, entrevistó también a 11 expertos legales, quienes en su mayoría consideraron que no se puede acabar con la ciudadanía por nacimiento sólo mediante una orden ejecutiva, como lo propone Trump.
Por ejemplo, Keith Whittington, profesor de política, de la Universidad de Princeton, consideró la orden ejecutiva como “un esfuerzo absurdo” pues considera que tal disposición sería impugnada en tribunales.
Peter Shane, profesor de derecho de la Universidad Estatal de Ohio dijo a Vox que la Décimocuarta Enmienda no puede cambiarse con una orden excepto por medio de un proceso formal.
Plan de Trump y precedente ante Corte
El plan del presidente Trump para desincentivar la inmigración ilegal al terminar la ciudadanía “automática” para los hijos de extranjeros ilegales, busca que se firme una orden ejecutiva y así evitar que las agencias federales brinden la nacionalidad estadounidense a hijos de migrantes.
El equipo de campaña planteó en un comunicado oficial que lo que se busca, es “explicar” el supuesto significado de la 14 Enmienda al alegar que la ciudadanía estadounidense se extendería sólo para aquellos nacidos en y “sujetos a la jurisdicción” de los Estados Unidos.
Lo que se busca con la orden ejecutiva es que a los hijos de extranjeros indocumentados no se les otorgue la ciudadanía, ni tampoco se les emitan pasaportes, número de seguro social, ni ser elegibles para beneficios de asistencia social.
La 14 Enmienda a la Constitución de EEUU señala que: “Todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos, y sujetas a su jurisdicción, son ciudadanos de los Estados Unidos y del estado en que residen”.
Contrario a lo expuesto por el equipo de Trump, Jessica Levinson, profesora de derecho de la Facultad de Derecho de Loyola en su postura para el medio Vox dijo que la Decimocuarta Enmienda de la Constitución es clara y “si una persona nace en los Estados Unidos, esa persona es ciudadana de los Estados Unidos”
Levinson añade que la cuestión se resolvió en gran medida en 1898, en el caso de Estados Unidos vs Wong Kim Ark ante la Corte.
“La Enmienda, en palabras claras y con intención manifiesta, incluye a los hijos nacidos, dentro del territorio de los Estados Unidos, de todas las demás personas, de cualquier raza o color, con domicilio dentro de los Estados Unidos. Todo ciudadano o súbdito de otro país, mientras esté domiciliado aquí, está bajo la lealtad y la protección y, en consecuencia, sujeto a la jurisdicción de los Estados Unidos”, se indica en el caso.
Y aunque en 2015 el abogado y director fundador del Centro de Jurisprudencia Constitucional, John Eastman, dijo en un artículo de opinión en el periódico The New York Times, que la política de brindar la ciudadanía a hijos de padres en ilegalidad se basó en un “malentendido” de la Decimocuarta Enmienda. Sin embargo, Eastman comenzó a asesorar a Trump y hasta fue cuestionado por su papel en la promoción de un plan para revocar el resultado de las elecciones de EEUU de 2020.
Existe además otro documento de 1995, en el cual la Oficina de Asesoría Legal del Departamento de Justicia dijo al Congreso que no podría restringir la ciudadanía por nacimiento.
¿De dónde surge la ciudadanía por nacimiento?
José Israel Ibarra, investigador y profesor de migración y comunicación, del equipo de Continente Móvil, dijo a la VOA que existen dos tradiciones para obtener la nacionalidad las cuales son “ius soli” que quiere decir “derecho de suelo” o “derecho de ciudadanía por nacimiento en el territorio”, o por otro lado el “ius sanguinis”, el cual significa “derecho de sangre”.
En Estados Unidos adquieres la nacionalidad por nacer en el territorio, dijo Ibarra, por lo cual considera que es difícil que solo con un decreto pueda modificarse.
Actualmente en el mundo existen más de 30 países que reconocen la ciudadanía por nacimiento, y aunque las reglas varían, los principales se encuentran en América.
Nacimientos de extranjeros en EEUU
Como parte de las justificaciones que el equipo de campaña de Trump brinda para proponer políticas contra la migración, es que existen “decenas de miles” de mujeres que a través del “turismo de nacimiento” ingresan a EEUU en sus últimas semanas de embarazo para que sus hijos obtengan la ciudadanía estadounidense.
Pese a los comentarios, los datos más recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los CDC, registraron una disminución de bebés nacidos de no residentes extranjeros en Estados Unidos de 2019 a 2021 en más de 40 %. Mientras en 2021 se registraron 5,636 bebés nacidos de no residentes extranjeros, en 2020 fueron 6.179 bebés y en 2019 unos 10.042 bebés.
Hollie Webb, experta abogada en temas de migración de Al Otro Lado, dijo a la VOA que los políticos como Trump obtienen poder al encontrar personas a las que culpar por problemas sociales y económicos complejos que en realidad son un resultado de las políticas gubernamentales.
“Incluso si Trump pudiera poner fin a la ciudadanía por derecho de nacimiento, eso no significa que los inmigrantes dejarían de venir a Estados Unidos. Simplemente significa que miles de personas nacerían apátridas, sin ciudadanía en ningún país”, dijo.
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