Un monitoreo de la ONG Centro de Justicia y Paz (Cepaz) registró 212 femicidios en Venezuela desde el 1 de enero hasta el 13 de noviembre. La organización hizo un llamado a la sociedad civil a seguir presionando y al Estado para que preste más atención a este delito.
Carolina Godoy, investigadora y coordinadora de género de Cepaz, fue la encargada de presentar el más reciente informe de la organización, que abarca del 14 de junio al 13 de noviembre, cuando Venezuela todavía estaba alternando entre una semana de flexibilización de los sectores comerciales con otra de cuarentena radical.
De acuerdo al monitoreo a medios realizado, entre el cuarto y el octavo mes de la cuarentena, hubo 103 casos de femicidios en el país. “Es decir, en promedio, hay en Venezuela un femicidio cada 28 horas”, señaló Godoy.
En este último corte, el 47,5% de las víctimas tenía entre 23 y 43 años. La investigadora destacó también que en dos de los casos eran mujeres mayores de 80 años.
En cuatro de los casos, la víctima estaba embarazada, pero en total 41 niños quedaron huérfanos, señala el monitoreo.
Con respecto a la edad de los agresores, el reporte señala que 31,2% eran jóvenes entre 19 y 22 años. “Llama la atención este descenso en la edad. La violencia se viene presentando con mayor frecuencia en hombres más jóvenes”, apuntó Godoy.
La violencia contra la mujer, según los datos del estudio, se da mayoritariamente en su entorno. En el 31,3% de los casos agresor y víctima mantenían algún tipo de convivencia, mientras que en un 21,4% había algún vínculo familiar.
Entre las motivaciones aparentes de estos asesinatos, aparecen el desprecio y el aprovechamiento de las condiciones vulnerables, como en los casos de niñas (16,5%) y de ataques sexuales (14,6%).
Godoy explica que entre los fenómenos asociados al femicidio a indagar más, y que aparece en el periodo estudiado, está la participación - en 12 de los casos - de mujeres como sujeto activo de delitos.
“Es una reflexión más a que se tome con verdadero ahínco, con la importancia que merece, hacer cualquier análisis en sede judicial que parta del enfoque de género. ¿Cuántas de estas mujeres no se ven involucradas en estos hechos precisamente por el ejercicio de poder de su pareja?”, agregó.
En respuesta a una pregunta de la Voz de América, la investigadora señaló que el panorama para la mujer venezolana en 2021 “es bastante preocupante” y “desolador”. “Vemos un Estado perdido. Casi es no presente, en cuanto a una verdadera política de control”, indicó Godoy.
Recordó que recientemente el Ministerio Público explicó que este año se abrieron 185 causas por femicidio y en total se han privado de libertad a 167 personas por este delito y se han logrado 26 sentencias condenatorias.
A pesar de ver esta iniciativa con agrado, la investigadora señaló que “no es suficiente”, pues los datos no hablan “del verdadero problema que subyace desde el punto de vista del fenómeno de la violencia contra la mujer por razones de género”.
Godoy hizo un llamado a la sociedad civil a mantener la presión para que el Estado profundice en la situación y para que se dicten con rigor las políticas necesarias.
“No basta con que exista un delito, si la ley y la brecha que hay entre la aplicación de esta ley ejemplar es muy amplia con respecto a la efectividad de los procesos que se abren”, apuntó.
Situación en el exterior
El monitoreo que hace Cepaz también abarca la situación de las venezolanas en el exterior. Hasta el 13 de noviembre, la organización había tomado nota de la muerte de 56 venezolanas en el exterior.
De acuerdo al periodo estudiado para esta presentación, del 14 de junio al 13 de noviembre, se registraron 28 casos de femicidios de venezolanas en el exterior.
La mayoría de las muertes fue en Colombia (67,7%) y las mujeres eran menores de 31 años (60,7%). Esos casos dejaron 9 niños huérfanos.