Una funcionaria de alto rango del Departamento de Estado de Estados Unidos aseguró el jueves que Venezuela no cumple con las condiciones mínimas para celebrar elecciones parlamentarias y pidió a la comunidad internacional no reconocer los comicios.
“Estas elecciones son fraudulentas”, dijo Carrie Filipetti, subsecretaria adjunta para Cuba y Venezuela del Departamento de Estado. “No puede haber elecciones parcialmente libres: existen elecciones libre o elecciones que no son libres”, dijo la diplomática en una teleconferencia.
Las declaraciones de Filipetti se dan dos días después de que el jee de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, concluyera que, después de haber tenido contactos con la oposición venezolana y el gobierno en disputa de Nicolás Maduro, Venezuela no reúne las condiciones para un proceso electoral transparente.
Según Borrell, el gobierno en disputa invitó a la Unión Europea a realizar una misión de acompañamiento de elecciones durante los comicios programados para el tres de noviembre en Venezuela. Sin embargo, el diplomático aseguró que para dar el apoyo deben cumplirse unos mínimos de “credibilidad, transparencia e inclusividad” que ahora mismo no hay.
Filipetti pidió el jueves a la comunidad internacional “estar clara y unificada en que estas no son unas elecciones libres”.
“Necesitamos hacer más para apoyar al gobierno interino y la oposición en esta lucha”, dijo la diplomática.
Maduro convocó a nuevas elecciones parlamentarias para el seis de diciembre de este año, una medida que ha sido criticada por la oposición como un intento más por ahogar su representación política.
Las elecciones, que buscan renovar la Asamblea Nacional —controlada por la oposición—han sido también denunciadas por grupos en defensa de los derechos civiles como amañadas para favorecer al partido oficialista, el PSUV.
El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, y los principales partidos opositores venezolanos ya han dicho que no participarán en las elecciones parlamentarias, a las que comparan con los comicios del 2018, cuyos resultados fueron desconocidos por más de una veintena de países.
Los comicios podrían significar la pérdida del control opositor sobre la Asamblea Nacional, de la que Guaidó es presidente. Su puesto como líder del cuerpo legislativo es el argumento que el líder opositor usó para proclamarse presidente interino de Venezuela en enero del año pasado.
EE.UU., como reiteró Filipetti el jueves en el evento organizado por el centro de pensamiento Atlantic Council, ha asegurado que seguirá reconociendo a Guaidó sin importar los resultados de los comicios y busca que los demás países que lo aceptan como presidente interino sigan su postura.