El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha estado al tanto desde hace años de evidencias que vinculan con el narcotráfico al general Henry Rangel Silva, pero aun así lo promovió recientemente al cargo de ministro de Defensa, según documentos difundidos en Miami por el diario El Nuevo Herald.
Un reportaje publicado por el periódico revela documentos que dice haber obtenido en forma exclusiva de fuentes conocedoras del caso, según los cuales Chávez fue informado al menos desde 2007 que había altos oficiales venezolanos involucrados en operaciones de tráfico de drogas, entre ellos el entonces general de brigada Rangel Silva.
Uno de esos documentos, un informe que habría sido entregado a Chávez en enero de ese año, menciona el arresto de cuatro oficiales del ejército cuando transportaban 2,2 toneladas de cocaína, y sostiene que “existen suficientes elementos que vinculan de manera directa al GB Henry de Jesús Rangel Silva con la investigación y juicio seguido por la Fiscalía 7º y 22º del Estado Lara” en el caso.
Los indicios recopilados por las propias autoridades venezolanas contra Rangel Silva, dice el reportaje, fueron suficientes al menos para que funcionarios de su gobierno se atrevieran a acusarlo formalmente ante Chávez cuando el general encabezaba la temida Dirección Nacional de los Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP).
Pero el general nunca habría sido investigado, y por el contrario fue ascendido a fines de 2010 a general en jefe, el más alto grado entre los militares venezolanos, y a principios del mes en curso nombrado ministro de Defensa por Chávez.
Antes de su ascenso, Rangel Silva declaró que los militares venezolanos estaban “casados” con el gobierno de Chávez, y que un triunfo de la oposición en Venezuela no sería aceptado por las fuerzas armadas porque "sería vender al país”.
En la ceremonia que anunció el nombramiento del nuevo ministro, el presidente venezolano dijo sentir “envidia” al ver de dónde provenían las denuncias contra el general, y señaló que le acusan “de no sé cuántos hechos a través de la infamia, la mentira, la intriga (...) No tienen una sola prueba, porque todo es falso”, aseguró.
Paradójicamente el ahora ministro, a quien el gobierno condecoró esta semana en Venezuela por “su labor en la lucha contra el narcotráfico”, fue acusado en 2008 por el Departamento del Tesoro de EE.UU de estar involucrado en el apoyo a operaciones de narcotráfico de guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
De acuerdo con correos electrónicos descubiertos en las computadoras del cabecilla de las FARC Raúl Reyes, muerto en una operación militar el 1ro. de marzo de 2008, Rangel Silva mantenía una estrecha relación con dirigentes de ese grupo terrorista, entre ellos el actual jefe máximo de la guerrilla, Jorge Londoño, alias Timochenko.
