Entre la limitada información oficial sobre el inicio de un proceso de diálogo en Venezuela, muchos coinciden en que se necesita un proceso de ese tipo, “serio y con resultados concretos”, para sacar al país de la crisis política, económica y social que atraviesa.
Consultada por la Voz de América, Indira Urbajena, analista política y directora de Reunificados, una organización sin fines de lucro dedicada a la mediación, inclusión y reconciliación, dijo que se está trabajando para definir dónde continuará el proceso, así como en la ampliación y la cuota de participación por sectores.
“Lo único que van a cambiar es el formato, la esencia no cambia si se hace en México o en Venezuela”, señaló.
“El diálogo tiene que ser incluyente y con la mayor presencia de actores, porque esto no se trata de resolver las diferencias históricas de una oposición y el chavismo, sino de construir soluciones a los desafíos del país, generar gobernabilidad, coexistencia y la posibilidad de un futuro compartido”, afirmó Urbajena.
También dijo que se requiere una representación de las “diferentes oposiciones, de los sectores sociales de incidencia como la Iglesia, los empresarios, la clase trabajadora, las ONG, entre otros”.
Partidos políticos independientes de la oposición como la Alianza del Lápiz han revelado que participarán en el proceso de diálogo anunciado a inicios de mes por el presidente Nicolás Maduro, horas después de una reunión con una delegación de la Casa Blanca.
La Alianza del Lápiz anunció que presentará propuestas concretas para resolver problemas clave de los venezolanos y que, puntualmente, garanticen el crecimiento de los emprendedores y que los niños tengan acceso a la alimentación y la educación.
“Desde el Lápiz no vamos a aceptar que en el dialogo se pretenda dar ni limosnas ni migajas a los niños venezolanos. Nuestro objetivo es que en ese diálogo tengamos como resultado concreto un plan de alimentación nacional que permita que todas las unidades educativas, nacionales, estatales y municipales se conviertan en comedores escolares”, expuso Eric Ondarroa, secretario de organización política.
El candidato a la alcaldía de Caracas y director del partido político Alianza del Lápiz, Antonio Ecarri, ratificó su participación en la mesa de diálogo y subrayó la necesidad de dejar “las diferencias a un lado” para “salvar a una generación en peligro”, en referencia a los niños en estado de malnutrición y “condenados a la violencia”.
“Eso no espera al 2024, eso no puede esperar a un acuerdo politiquero”, insistió.
El partido Movimiento al Socialismo (MAS), propuso una reunión de la oposición para “acordar ideas comunes”, antes de una reunión con el Gobierno en la mesa de diálogo.
“Ningún sector de la oposición puede tener la representación de toda la oposición venezolana. Hay distintas visiones de los problemas, por lo que proponemos un diálogo nacional donde puedan participar las diversas organizaciones políticas y sociales de forma incluyente”, dijo Segundo Meléndez, presidente del MAS.
Primarias y candidaturas
Ecarri, además, anunció que se postulará como candidato en las elecciones presidenciales de 2024 sin pasar por un proceso de primarias con la oposición, e insistió en que su partido no tiene que ver ni con el Gobierno ni con la oposición tradicional, cuya estrategia, a su juicio, ha fracasado y se “corrompió”, en referencia a los recursos del Estado controlados por el Gobierno interino.
“Esas primarias van a estar controladas por el G4 (principales partidos de oposición), por los mismos fracasados de siempre, excluyendo a todo el país, excluyendo a los independientes. Esa exclusión al país para llevar un monopolio no tiene sentido”, afirmó.
Ecarri dijo a VOA que existe un reglamento aprobado por el G4, “a espaldas del país y donde no quiere que ninguno de los independientes participe, ni que participe ningún otro sector sino ellos mismos”.
Al respecto, una fuente de la Plataforma Unitaria negó a la VOA que se hubiera alcanzado algún acuerdo, pero afirmó que actualmente una comisión se encuentra estudiando y trabajando en un mecanismo de primarias.
La semana pasada, Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de mayoría chavista y jefe de la delegación de la mesa de diálogo en México entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición, dijo que no se reunirán con Juan Guaidó, considerado presidente interino de Venezuela por decenas de países.
Horas antes, Guaidó había reiterado su disposición de lograr en México un acuerdo que “aproxime una solución al conflicto”.
La mesa de diálogo en México quedó suspendida en octubre del año pasado después de la extradición a Estados Unidos del empresario colombiano Alex Saab, a quien el Gobierno de Maduro pretendía incorporar a la mesa de dialogo.
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