El Instituto de Derechos Humanos de la Asociación Internacional de Abogados (IBAHRI) presentó un informe altamente crítico que denuncia el deterioro de la situación de la justicia en Venezuela, señalando al presidente Hugo Chávez como parte del problema.
El informe de más de 80 páginas, titulado “La Desconfianza en la Justicia: El caso Afiuni y la Independencia de la Judicatura Venezolana”, señala “la falta de Independencia del Poder Judicial” en Venezuela.
También la delegación que visitó Venezuela en febrero de 2011, reveló que esa “preocupación se hizo realidad en el caso de la jueza María Lourdes Afiuni”, demostrativo de la falta de independencia en el Poder Judicial en Venezuela, "desde que el presidente de la República así lo afirmara expresando que el proceso seguido a la Jueza debería servir de ejemplo a otros jueces”.
En tal sentido, la misión expresa en el informe su “preocupación por las múltiples violaciones al debido proceso y a las garantías judiciales en el proceso en contra de la jueza Afiuni. Entre ellas, las violaciones al derecho a la libertad personal, la falta de información adecuada sobre la acusación, el derecho a la defensa, la presunción a la inocencia y la falta de procedimiento para suspenderla de su cargo”.
También subraya que “en general, la independencia e imparcialidad de la Judicatura en Venezuela ha empeorado de forma significativa desde 2007”, cuando la IBAHRI realizara su última visita.
El informe
El informe destaca los resultados de la visita a Venezuela realizada por la misión del Instituto integrada por juristas de alto nivel, entre los días 8 al 11 de febrero de 2011, para investigar la situación del Poder Judicial venezolano y la situación de la profesión jurídica.
La delegación visitante estuvo presidirá por el jurista brasileño Belisário dos Santos Junior (ex Secretario de Justicia del Estado de Sao Paulo y miembro de la Comisión Internacional de Juristas); el profesor costarricense Dr. Carlos Tiffer, (ex Fiscal del Ministerio Público y ex juez Superior Penal de la Corte Suprema de Justicia), y el británico Alex Wilks, (abogado de alto rango del Instituto de Derechos Humanos de la IBA).
La misión entrevistó miembros y ex miembros de la judicatura, abogados, organizaciones no gubernamentales (ONGs) y miembros del personal diplomático de las embajadas, pero no fue recibida por funcionarios de los Poderes Públicos venezolanos.
La delegación fue recibida además por el Agente para los Derechos Humanos ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y de Naciones Unidas (ONU).
El presidente es parte del problema
En el resumen presentado por la delegación, se destaca que la falta de independencia del Poder Judicial -que ha sido reiteradamente señalada por organismos internacional de protección de los derechos humanos de OEA y ONU-, se ve incrementada además por “las declaraciones y conductas de funcionarios de los poderes públicos nacionales -empezando por el propio presidente de la República (Hugo Chávez)- que atacan gravemente la independencia de la judicatura”.
La IBAHRI concluye que “la separación de poderes, esencial en un Estado de Derecho y en una Democracia, se desdibuja cada vez más en Venezuela” y destaca en tal sentido, las preocupantes “declaraciones del presidente Hugo Chávez sobre la imposibilidad de que los jueces actúen en contra de la revolución”, que someten a la judicatura venezolana a constantes presiones políticas.
En su informe, la IBAHRI “hace un llamado al Estado venezolano a garantizar la separación de poderes, para fortalecer el Estado de Derecho y la independencia e imparcialidad del Poder Judicial”.