“Dinero en efectivo no se consigue en ninguna parte, hay personas que cobran 35% y hasta 40% para darte el efectivo”, dice a la Voz de América José Arrollo, un venezolano que se dedica a la venta de chicha —una bebida popular en Caracas.
“He tenido que pagar ese porcentaje para tener efectivo y poder comprar leche y azúcar” cuestiona.
La venta de billetes ocurre pese a que el gobierno lo prohibió. En agosto la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario, SUDEBAN, suspendió la entrega de avances de efectivo incluso en los comercios por “presuntas irregularidades (…) con los cobros de comisiones entre 10% y 35%, además del bachaquerismo”.
Mirtha, una mujer que vive de la buhonería, también se ha visto afectada por la escasez del efectivo.
“Si no hay efectivo cómo vendemos, no hay real”, se queja. Insiste que el negocio ha caído por la falta de billetes.
Los consultados por la Voz de América denuncian que solo es posible retirar de las entidades bancarias un máximo de 10 mil bolívares al día (10 centavos de dólar en el mercado paralelo).
“Con 10 mil bolívares no se compra nada”, reclama Arrollo.
“No tengo sencillo, el banco solo está dando 10 mil bolívares”, dice María, una abuela venezolana, mientras observa ropa íntima en un comercio al oeste de Caracas. "¿Acepta cestatickets?", pregunta tímidamente a la dueña.
La mujer ofreció tres papeletas del “Bono del Niño Jesús” a cambio de un sostén.
“El Bono del Niño Jesús”, que hoy sirve como “trueque” frente a la escasez de efectivo, fue otorgado por el gobierno como regalo de Navidad a 4 millones de familias “para proteger la adquisición de alimentos y artículos” informó el mandatario Nicolás Maduro a finales de noviembre.
“Sí, mamita. Aaceptamos cestatickets —¿qué vamos a hacer?—, dinero no hay”, respondió Libeth Giménez, dueña de la tienda de ropa íntima. Fue la primera venta del día.
Lilibeth solo acepta efectivo.
Por estos tiempos también escasea el servicio de punto de venta o banca electrónica. “Yo he ido a varios bancos para adquirir punto de venta y no hay, te dicen que no hay”, se lamenta.
Una historia similar es la de Carlos Hernández, un vendedor de helados en el este de Caracas que busca sortear la falta de billetes. “Tengo dos meses aceptando trasferencia porque no hay efectivo, el dinero no alcanza para nada”, dice.
El gobierno alega que la escasez del efectivo se debe a “mafias” que sacan el papel moneda del país para buscar dañar la economía nacional.