El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el miércoles una orden ejecutiva para evitar que las familias de migrantes sean separadas en la frontera con México, pero aclaró que continúa la política de "cero tolerancia" para las personas que ingresen ilegalmente al país.
Acompañado del vicepresidente Mike Pence y de la secretaria de Seguridad Nacional Kirstjen Nielsen, dijo que considera "muy importante" la orden ejecutiva.
"Se trata de mantener a las familias unidas, al mismo tiempo, y de estar seguros de que tenemos una frontera muy poderosa, una frontera muy sólida y que la seguridad en la frontera será igual o mayor que anteriormente. Así que vamos a tener fronteras muy fuertes, pero vamos a mantener unidas a las familias", señaló.
Trump reconoció que no le gustó la visión ni la sensación de ver a las familias separadas, y dijo que "es un problema que se ha prolongado durante muchos años, como ustedes saben, a través de muchas administraciones. Y estamos trabajando mucho en inmigración".
Dijo que el problema "ha sido dejado de lado", que la gente no lo ha solucionado y que su gobierno está "lidiando con eso".
El presidente afirmó también que su gobierno "paso a paso" está enfrentando muchos problemas diferentes que datan de muchas décadas, como Corea del Norte, Irán, y "una economía que iba en la dirección equivocada".
"Así que vamos a mantener juntas a las familias y eso resolverá ese problema. Al mismo tiempo, estamos manteniendo una frontera muy poderosa y continúa siendo cero tolerancia. Tenemos tolerancia cero para las personas que ingresan ilegalmente al país", concluyó el mandatario.
Anteriormente en el día, durante una reunión con su gabinete en la Casa Blanca, Trump había dicho que estaba trabajando para acabar con la política que ha generado escándalo a nivel mundial, y prometió mantener la mano dura con la inmigración, diciendo "de lo contrario, nuestro país será invadido por personas, por el crimen y por todas las cosas que no representamos y que no queremos".
La secretaria Nielsen, el presidente y otros funcionarios del gobierno han dicho reiteradamente que la única manera de poner fin a las separaciones es mediante una nueva ley del Congreso, pero los demócratas y algunos republicanos dicen que el presidente podría hacerlo con una llamada telefónica.
En las noticias de los últimos días han primado las imágenes de niños encerrados en jaulas en la frontera y grabaciones de audio de niños que lloran y claman por sus padres.
Una de las fuentes dijo que Nielsen no cree que haya certeza de que el Congreso tomará alguna medida.
Al preguntarle sobre la posibilidad de un decreto del ejecutivo, la vocera Sarah Huckabee Sanders dijo a la prensa: "los mantendremos al tanto. Cuando tengamos un anuncio, lo haremos".
