El presidente estadounidense, Donald Trump, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe, iniciaron dos días de conversaciones que brindan a ambos líderes la oportunidad de reforzar un tratado de seguridad establecido hace mucho tiempo y reforzar su relación económica.
"Nos enfrentamos a numerosos desafíos y la cooperación bilateral es esencial", dijo Trump durante una conferencia de prensa conjunta.
"Nuestro país está comprometido a ser un socio activo y plenamente comprometido. Trabajaremos juntos para promover nuestros intereses comunes, que tenemos muchos, en la región, incluyendo la defensa contra el misil de Corea del Norte y la amenaza nuclear, los cuales considero de muy, muy alta prioridad", agregó Trump.
Trump y Abe mantuvieron conversaciones en la Oficina Oval, seguido de una conferencia de prensa a mediodía.
Los dos líderes volarán más tarde a Palm Beach, Florida para una estancia de fin de semana en la finca Mar-a-Lago de Trump.
Abe es el primer líder extranjero en visitar Mar-a-Lago desde que Trump fue juramentado como presidente.
Será la mayor parte del tiempo que Trump habrá gastado con un líder extranjero desde que se convirtió en presidente el 20 de enero.
Es la segunda reunión cara a cara de Trump con un aliado clave después de recibir a la primera ministra británica, Theresa May, hace dos semanas.
"Creo que el presidente no sólo disfruta de la compañía de Abe, también quiere conocerlo mejor, y tener una mayor relación bilateral", dijo el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer. "Comprende la importancia de la región", agregó Spicer.
La administración Trump dio un tono positivo a la cumbre del fin de semana, diciendo que el presidente de EE.UU. se opondría a cualquier declaración unilateral que amenazara la autoridad de Japón sobre las islas en disputa en el Mar de China Oriental.