El presidente Donald Trump llegó el miércoles a Bruselas mientras miles de manifestantes tomaban las calles para protestar por su visita.
Trump, quien hace un año dijo que Bruselas se había convertido en un "lugar horrible", se reunió con el rey Felipe de Bélgica y con ministros de alto rango en la víspera de la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, evento principal en su visita de dos días a Bélgica.
El primer ministro Charles Michel dijo que insistió en que Trump debía apoyar absolutamente el Acuerdo de París sobre cambio climático y honrar los compromisos estadounidenses a acuerdos comerciales multilaterales, dos asuntos en los que Trump ha manifestado tener dudas.
"Fue una discusión sin tabús. No hubo un lenguaje diplomático. Los mensajes fueron directos por ambas partes", comentó Michel respecto a su reunión.
El tema del cambio climático estará en el centro de una reunión del G-7 en Sicilia el viernes, y Trump no se ha comprometido claramente a respetar el crucial Acuerdo de París que busca controlar el calentamiento global.
Trump y Michel dijeron que estaban de acuerdo en materia de terrorismo, tema que resulta una vez más un tópico inmediato en Europa ante el ataque ocurrido esta semana en Manchester, Inglaterra.
"Vamos a ganar; cien por ciento", dijo Trump, a quien Michel calificó como un aliado en el combate global contra el terrorismo.
Aproximadamente a un kilómetro de distancia, miles de manifestantes no eran tan amables con el presidente estadounidense y gritaban: "¡No queremos a Trump! ¡No queremos a Trump!". Reclamaban a Trump a gritos por todo, desde su plan para construir un muro en la frontera con México a su trato a las mujeres y su promoción de la industria de carbón mineral.
"Estamos aquí hoy porque estamos contra el sexismo. Esa es mi principal razón, y encuentro que Trump es realmente horrible", dijo la manifestante Dorien Vanden Boer.
La ruta de los manifestantes se mantuvo alejada de la Embajada de Estados Unidos y del Palacio Real, donde Trump estaba teniendo reuniones.
Trump tuvo una agenda ligera en Bruselas el miércoles antes de las conversaciones con funcionarios de alto rango de la Unión Europea agendadas para la mañana del jueves y de una cumbre completa con líderes de la OTAN por la tarde. Trump planea volar a Sicilia, Italia, a última hora del jueves.