Hasta el lunes deberá esperar Leopoldo López para conocer la decisión del tribunal 28 sobre la resolución de la Organización de Naciones Unidas que consideró arbitraria su detención y recomienda su inmediata liberación.
Por tercer día consecutivo el tribunal a cargo de la jueza Susana Barreiro no abrió sus puertas, alegando labores administrativas propias del juzgado.
Durante tres días la defensa de López ha esperado ante la puerta del despacho judicial para conocer cuál es la posición que fija ante el dictamen de la instancia internacional.
Juan Carlos Gutiérrez, defensor de López, dijo hace dos días a la Voz de América que, de mantenerse el cierre del tribunal por más de 48 horas seguidas, podía interpretarse como una táctica dilatoria contra el ejercicio de la justicia.