La tormenta tropical Bill entrará esta madrugada al sureste del puesto de Galveston, en Texas, llevando lluvias torrenciales, fuertes vientos y la posibilidad de tornados, según anticipa el Centro nacional de Huracanes.
Las autoridades emitieron el lunes una orden de evacuación voluntaria para todos los habitantes, unos 3.000, de Península Bolívar, situada en el condado de Galveston, donde las carreteras podrían quedar cubiertas de agua.
Se pronostica que la tormenta deje caer entre 10 y 20 centímetros de lluvia en el este de Texas y 30 centímetros en otras áreas, por lo que se esperan condiciones parecidas a las de hace un mes, cuando el estado fue inundado por lluvias igualmente copiosas.
Docenas de escuelas a lo largo de la costa de Texas estarán cerradas el martes, incluyendo las de Houston y Galveston.
Además, el gobernador, Greg Abbott, pidió a la población que se mantenga informada de las alertas meteorológicas y que siga las recomendaciones de los funcionarios locales, a la vez que autorizó el uso de recursos de emergencia para las comunidades que se vean afectadas.
Los meteorólogos esperan que la tormenta se debilite una vez toque tierra, pero avanzará hasta el norte del estado y hacia Oklahoma durante los próximos días.