La tasa de natalidad en Estados Unidos ha caído a su nivel más bajo en las últimas tres décadas, de acuerdo a cifras de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades. Sin embargo, según catedráticos, esto corresponde a una tendencia normal en países desarrollados.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, en 2018, se registraron 3.791.712 nacimientos, es decir, 2% menos que el año anterior.
“Este es un patrón de un país desarrollado, es el patrón mismo que se ve en las naciones europeas, en Estados Unidos no se había observado precisamente porque había unos diferenciales pequeños en las tasas de fertilidad de los diferentes grupos raciales y étnicos que viven en el país”.
Dijo María Aysa Lastra, quien es profesora de sociología especializada en estudios poblacionales de la Universidad de Winthrop, en Pensilvania. Vía Skype, explicó a Voz de América que estos datos demuestran que las mujeres, en Estados Unidos, esperan más tiempo para tener hijos.
María Aysa-Lastra, de la Universidad Winthrop dijo que “Las mujeres están ahora más educadas y participan más activamente en la educación superior, esperan tener trabajos después de la educación y entonces esto quiere decir que están retrasando el matrimonio y retrasando tener hijos”, aseguró a la VOA.
La catedrática afirma que se trata de un resultado estructural de la población y no espontáneo. Para revertir estas cifras, sugiere la aplicación de políticas específicas.
“Por ejemplo, acceso universal a la salud, esa sería una, la otra sería acceso universal a cuidados de niños, a Childcare, a períodos de ajuste en el trabajo, lo que se llama en Estados Unidos Paid Leave.”
La profesora Aysa Lastra agregó que esta tendencia es similar a la que registran países de América Latina, como México y Brasil.