Las autoridades estadounidenses arrestaron a un hombre musulmán de 25 años, por intentar usar explosivos y armas de fuego para atacar negocios y otros sitios en el estado de Florida.
Sami Osmakac, un ciudadano estadunidense naturalizado, originario de Kosovo, fue arrestado en Tampa, Florida, tras meses de investigación por parte del Departamento Federal de Investigaciones, el FBI.
Osmakac fue acusado de intento de uso de un arma de destrucción masiva.
Las autoridades alegan que Osmakac se reunió con un agente encubierto del FBI, de quien trató de obtener varias armas de fuego, incluyendo un AK-47, al igual que un coche bomba y un cinturón de explosivos diseñado para matar a un gran número de personas.
El sospechoso dio al agente un pago inicial de $500 dólares por un fusil automático AK-47, varias bombas caseras y un cinturón cargado de explosivos.
Osmakac estaba siendo vigilado desde hacía meses y los explosivos y armas a los que tuvo acceso eran inoperantes, según las autoridades.
De acuerdo con la fiscalía, el acusado filmó un video poco antes de ser arrestado en el que explica sus motivos para llevar a cabo los atentados que planeó.
En la grabación, Osmakac dice que la "sangre" de los musulmanes tiene más valor que la de los que no son creyentes del Islam.