El sospechoso del asesinato de siete personas, incluidos dos niños, y de mantener a otras dos como rehenes en Michigan finalmente se suicidó, según informó la policía.
La toma de rehenes se produjo en la casa del sospechoso, de 34 años, que acabó con su vida con un tipo, después de horas de secuestro.
Acorralado desde su vivienda, el sospechoso soltó a una de las rehenes mientras otras dos quedaron dentro cuando se suicidó en Grand Rapids, al oeste del estado de Michigan.
Antes de todo ello, la policía había hallado cuatro personas muertas en una casa y otras tres en otra, cuyas pistas le condujeron a la persecución de Dantzler, quien enfrentó un tiroteo y huyo hacia su casa, donde capturó a otras tres rehenes.
El sospechoso dijo que quería entregarse, pero mientras hablaba con los negociadores sobre cómo se rendiría se disparó.
La policía ubicó a Dantzler en un vehículo poco después del macabro hallazgo de los cuerpos, según informa Reuters.
