Los delegados que asistieron a una reunión patrocinada por la ONU sobre la crisis en Siria están haciendo un llamado a todas las facciones a permitir que las agencias humanitarias puedan entregar la ayuda que se necesita desesperadamente para millones de personas.
Los representantes de los gobiernos y las agencias de ayuda más importantes se reúnen esta semana en Ginebra para discutir los aspectos prácticos de las operaciones humanitarias en Siria, los países de refugio vecinos e Irak.
La reunión, convocada por la Organización para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), pone especial énfasis en la situación cada vez más grave que enfrentan los civiles sirios, tanto dentro como fuera del país.
Aumenta cifra de muertos
El próximo mes, Siria entrará en su quinto año de guerra. Se estima que unas 200 mil personas han muerto, 7,6 millones de desplazados internos y más de 3,2 millones de refugiados en el Líbano, Jordania, Turquía, Irak y Egipto.
Siria es considerada la peor crisis humanitaria del mundo, con más de la mitad de la población de 12,2 millones en necesidad de asistencia.
Kelly Clements, subsecretaria adjunto para la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de EE.UU., dijo que el suministro de ayuda al país es extremadamente difícil y peligroso.
Agregó que el problema más urgente es conseguir acceso a cientos de miles de personas necesitadas en áreas consideradas peligrosas.
“Casi un cuarto de millón de sirios hoy están viviendo en una zona sitiada por la violencia y una gran parte de ellos requiere el suministro de alimentos y atención médica urgente", dijo. "La ONU en la actualidad no tiene acceso a 600 mil personas que residen en Raqqa, controlada por ISIL y Deir ez-Zor y las más grandes ONG también han dejado de operar”.
Unas 2,8 millones de los 12,2 millones de sirios se encuentran en zonas controladas por el Estado islámico.
Además, Clements dijo la ONU ha sido incapaz de entregar ayuda por más de dos meses a unos 18 mil palestinos atrapados en el campamento de refugiados de Yarmuk, en Damasco.
Estados Unidos es el mayor donante de ayuda humanitaria en la crisis siria, proporcionando más de $3 mil millones de dólares desde el inicio del conflicto, y acaba de anunciar un adicional de $125 millones en ayuda humanitaria para el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, que asiste a casi seis millones de sirios en el interior del país y en los países vecinos cada mes.
