Según anuncian las agencias Siria aceptó cooperar con Naciones Unidas para averiguar más información sobre un presunto reactor secreto que podría haber servido para fabricar armas atómicas.
Damasco se negó durante tres años a aportar información concluyente sobre el reactor secreto que la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) buscaba incesantemente después de que aviones israelíes bombardearon en 2007 un reactor nuclear casi terminado que habría tenido capacidad para producir plutonio una vez que entrara en funcionamiento.
Siria emprende este compromiso ante el anuncio de que el Consejo de Seguridad podría denunciar a Siria por violar el Tratado de No Proliferación Nuclear en su reunión del próximo mes.
El director de la OIEA, Yukiya Amano, cita a altos funcionarios sirios que afirmaron su disposición “a cooperar plenamente con la entidad" en la investigación del sitio sospechoso.
Amnistía a opositores
En tanto, la televisión estatal de Siria anunció que el presidente Bashar al-Assad está ofreciendo a los opositores del gobierno una amnistía general, aunque no se ofrecieron detalles específicos de la información.
Enfrentado a una ola de protestas, el ofrecimiento del mandatario se extiende a miembros de diferentes movimientos políticos, incluido la proscrita Hermandad Musulmana.
Siguen las muertes
La decisión del presidente Assad se conoce al mismo tiempo que activistas denunciaron que las fuerzas militares sirias dispararon con ametralladoras y artillería a manifestantes anti-gobierno en el centro del país, como parte de renovados ataques.
Otros 15 civiles podrían haber muerto a manos de los militares durante las manifestaciones de la oposición en Siria.
Por primera vez en los dos meses que ha durado la revuelta contra el presidente, lugareños armados con fusiles automáticos y lanzagranadas opusieron una firme resistencia, dijeron activistas según la agencia The Associated Press.
También cuatro soldados fallecieron durante los enfrentamientos que encabezan las fuerzas gubernamentales respaldadas por tanques, artillería y helicópteros, según precisa la agencia estatal de noticias de Siria que también reporta 14 heridos en Tabliseh.
Las ciudades de Talbiseh, Rastan y otras comunidades en la zona central de Siria, continúan siendo atacadas mientras los residentes protagonizan manifestaciones anti gubernamentales en petición de la salida del presidente Bashar Assad.
Dos activistas en la zona dijeron que los lugareños de las dos localidades atacadas desde el domingo en la provincia de Homs, centro del país, tomaron las armas contra los soldados e integrantes de las fuerzas de seguridad y que hubo nuevas bajas, aunque desconoce la cifra, señala la agencia de noticias AP.
Más de 1.000 personas han muerto en la ofensiva del gobierno desde que iniciaron los levantamientos en contra del régimen de Bashar Assad a mediados de marzo, según los grupos de derechos humanos.