Según el experto en estudios económicos de la Institución Brookings, en Washington, George L. Perry, uno de los sectores que presentó buen crecimiento fue el exportador. “Otra área fue la construcción fuera de la construcción de casas. La construcción empresarial estaba aumentando y la construcción en particular en áreas comerciales”, aseguró Perry.
Las cifras de desempleo en Estados Unidos están en su nivel más bajo en casi dos años y medio, por lo que la confianza del consumidor está aumentando. Pero hay nubarrones oscuros en el comienzo del nuevo año. China, la economía de mayor crecimiento mundial, está desacelerándose y la crisis de deuda en Europa muestra pocas señales de mejorar.
“Estados Unidos exporta gran cantidad a Europa. Si Europa cae en otra recesión, el crecimiento de las exportaciones va a terminar y eso afectará los trabajos en EE.UU., y será causa de que EE.UU. avance a una recesión”, dice Perry.
El aumento de la inflación y la desaceleración en China ya han disminuido la demanda de algunas materias primas. Pero Perry dice que la desaceleración se debe, en parte, a los esfuerzos de Beijing por impedir que su economía se sobrecaliente.
Por su parte, el presidente del Banco Mundial, Robert Zoelick, exhortó a Europa y a sus principales socios comerciales a que actúen responsablemente. “Europa tiene que rescatar a Europa. ¿De acuerdo? Y es muy importante. Si hay algún mensaje cuando me preguntan qué puede hacer EE.UU. y que puede hacer China, lo mejor que pueden hacer es atender su actuación en casa, ser una fuente de crecimiento en casa, y en segundo lugar, ser una fuente de confianza para el mercado”, sentencia Zoelick.
Aunque Zoellick dice que está alentado por las actuales reformas en China destinadas a reducir la dependencia del país de las exportaciones, advirtió a los legisladores estadounidenses tener cuidado con más demoras para tratar la creciente deuda de la nación, que llega a casi 15 billones de dólares.
“La reducción de la calificación de la deuda de EE.UU. de triple A no afectó las finanzas hoy, pero puede ser uno de esos eventos que la gente mire dentro de 10 años y diga, ¿Recibieron alguna advertencia? ¿Prestaron atención o continuaron haciendo lo que estaban haciendo?”, dice.
A menos que los líderes estén dispuestos a tomar difíciles decisiones para estabilizar la economía mundial, Zoellick y muchos otros economistas dicen que los problemas de Europa, EE.UU. y China podrían formar lo que llama una “tormenta perfecta” en 2012 similar a la crisis financiera de 2008.
