El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, pidió el lunes más sanciones contra el gobierno de Nicolás Maduro, al denunciar lo que consideró "la consolidación del régimen dictatorial en Venezuela".
"Exigimos que no se negocie la paz, la democracia, ni la libertad" en Venezuela, precisó el diplomático.
El documento de Almagro, de 49 páginas, señala que la democracia fue "completamente eliminada el 30 de julio", con "la instauración de una ilegítima Asamblea Constituyente".
"Reiteramos la solicitud que formuláramos en el pasado para que la comunidad internacional continúe aplicando sanciones cada vez más duras contra el régimen y autoridades del régimen", indicó Almagro, en el cuarto informe de la Secretaría de la OEA sobre la crisis política venezolana.
Maduro instaló el 4 agosto una Constituyente con poderes absolutos, no reconocida por la oposición, ni por varios países latinoamericanos, Estados Unidos y la Unión Europea.
Por la aprobación de la Constituyente, Estados Unidos y Canadá han impuesto sanciones financieras al gobierno de Maduro, además de disponer medidas específicas contra el mandatario y varios integrantes de su gobierno.
El documento de Almagro, de 49 páginas, señala que la democracia fue "completamente eliminada el 30 de julio", con "la instauración de una ilegítima Asamblea Constituyente".
"La Secretaría General de la OEA ha venido documentando, denunciando y presentando pruebas de la alteración del orden constitucional y de las agresiones continuas a la institucionalidad en Venezuela", indicó el texto.
En el video publicado en la cuenta de Twitter del diplomático junto con su informe, Almagro dijo que en los tres reportes previos de la Secretaría General (de junio de 2016, y marzo y julio pasado) buscaron mostrar cómo desde la "alteración del orden constitucional" se fue pasando a la "total ruptura del orden democrático".
En el tercer informe, Almagro condenó además la represión de los opositores en Venezuela, donde unas 125 personas murieron entre abril y julio en el marco de las manifestaciones antigubernamentales.
"En Venezuela se han violentado en forma sistemática y reiterada los elementos esenciales y los componentes fundamentales de la democracia como los define la Carta Democrática Interamericana", subrayó Almagro en su cuarto informe, urgiendo a los países de la OEA a emitir una "condena rotunda" al gobierno venezolano.
"No se trata de aislar al pueblo venezolano, se trata de apoyarlo, condenando al régimen dictatorial", explicó Almagro al solicitar a la comunidad internacional que "continúe aplicando sanciones cada vez más duras contra el régimen y sus autoridades" en Venezuela.
Almagro también pidió "reconocer a los países del Hemisferio que han declarado que no aceptarán los resultados de la Asamblea Constituyente del 30 de julio de 2017 (...)Reafirmar la solidaridad con el pueblo de Venezuela, admitir que la situación actual de la República Bolivariana de Venezuela representa un riesgo para la paz y seguridad hemisférica, y ordenar la reparación al pueblo venezolano por la violación de los instrumentos internacionales".
El Secretario General de la OEA, además solicitó: "la cesación inmediata de la represión, la liberación de todos los presos políticos, la investigación a gran escala de los actos de figuras clave del régimen y sus subordinados, la realización de elecciones libres y justas, el retorno al orden constitucional, el establecimiento de un mecanismo eficaz de lucha contra la corrupción, y la re integración al Tribunal Supremo de Justicia de los magistrados juramentados", entre otros asuntos.
La OEA en su conjunto no ha logrado aún alcanzar una posición unitaria sobre la situación en Venezuela, a pesar de que 13 países miembros del organismo emitieron a fines de julio una declaración exhortando al gobierno venezolano a abandonar la idea de la Constituyente.