Una reunión multitudinaria ha reunido a miles de manifestantes en Washington, quienes pedían el fin del antisemitismo y la liberación de los rehenes que Hamás tiene retenidos desde el pasado 7 de octubre.
El evento ha sido organizado por las Federaciones Judías de América del Norte y la Conferencia de Presidentes de las principales organizaciones judías y tiene lugar en la Explanada, más conocida como el National Mall.
“Creo que es muy importante darle apoyo a Israel. Independientemente de lo que uno piense, que es importante para los palestinos, son inaceptables estos actos de terrorismo”, dijo a la Voz de América Hernán Roosevelt en los predios del lugar.
El ataque de Hamás del 7 de octubre dejó más de mil muertos en Israel y llevó a la captura de varios centenares de rehenes, todavía en poder del grupo ilegal Hamás. Desde entonces, se estima que más de 10.000 palestinos, cientos de ellos niños, han fallecido como consecuencia de la ofensiva israelí.
“Las guerras se hacen entre soldados, no con civiles”, dijo Roosevelt al deplorar el asalto y la toma de rehenes, pero también consideró que el ánimo internacional por los ataques a Gaza que Israel ha llevado como respuesta, han dañado a la causa israelí.
“Cuando hubo el asalto de Hamás hubo una muy importante empatía con Israel, pero a medida en que Israel está tratando de encontrar a la gente de Hamás y con un montón de víctimas palestinas, que por cierto es totalmente deplorable, ha cambiado mucho la simpatía por Israel, y lo más serio es con la gente joven, los actos de antisemitismo en las escuelas, las universidades son preocupantes”, comentó a la VOA.
Como parte de una contramarcha, el rabino Dobbi Feldman, de la organización Judíos Unidos contra el Sionismo, considera que los manifestantes presentes están equivocados. “Alientan o empeoran todo al apoyar esta ocupación de Palestina. Simplemente estamos empeorando todo. Si esas personas están realmente preocupadas por la seguridad de los seres humanos, deberían darse cuenta de que todo lo que Israel representa es criminal: causar tanta muerte y destrucción, tantos crímenes al pueblo palestino, y muerte y destrucción al pueblo judío”, consideró.
Este martes la administración del presidente Joe Biden dejó en claro que apoya la participación de una tercera parte de manera independiente para la evacuación de quienes permanecen en los centros hospitalarios en Gaza.
En Fotos | Miles de personas marcharon a favor de Israel en Washington
El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, dijo en un intercambio con reporteros que a EEUU le gustaría ver “una evacuación segura de los pacientes en los hospitales de Gaza” y que así estén fuera de peligro mientras las fuerzas israelíes avanzan en territorio bajo dominio de Hamás.
Un hombre que viajó desde la ciudad de Cleveland, Ohio, para apoyar la causa de Israel dijo a la VOA ha visto cómo “el apoyo del gobierno de Estados Unidos ha sido muy fuerte en general”, pero lamentó que “hay algunas personas dentro del gobierno que no nos apoyan tanto como nos gustaría”.
“Pero el presidente Biden ha sido un gran apoyo, y todo su gabinete ha sido un gran apoyo, y el envío de armas y buques de guerra a la zona ha sido de gran ayuda”, afirmó.
“Será una oportunidad para unirnos en solidaridad con el pueblo de Israel, demostrar nuestro compromiso con el aliado más importante de EEUU en Oriente Medio, asimismo condenar la creciente tendencia de violencia y acoso antisemitas y exigir que todos los rehenes sean liberados de forma inmediata y segura”, expresaron los organizadores en un comunicado anteriormente.
Fricciones en el seno del gobierno
Por otro lado, el mismo martes se sumó una nueva carta de protesta por el apoyo de Estados Unidos a Israel en su guerra en Gaza.
Esta vez más de 400 funcionarios políticos y miembros del personal que representan a unas 40 agencias del gobierno estadounidense enviaron una carta al presidente Biden expresando su disconformidad por el apoyo a Israel.
La misiva pide al presidente Biden que busque un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza y presione a Israel para que permita la entrada de ayuda humanitaria al territorio.
De acuerdo al permiso otorgado por el Servicio Nacional de Parques en base a la información proporcionada por los organizadores de la marcha anticipaban la llegada de hasta 60.000 personas.
[Con la colaboración de Júlia Riera, periodista de VOA, desde Washington]
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