La Comisión Europea alertó a través de un comunicado que granjeros en países como España, Bélgica, Bulgaria, Grecia, Francia, Italia, Chipre, Letonia, Hungría, Holanda, Polonia, Portugal y Rumania mantienen a estos animales en espacios muy reducidos, por lo que hizo un llamado a los gobiernos para que corrijan las "deficiencias en el cumplimiento de la legislación comunitaria relativa al bienestar de los animales".
Según una ley que fue aprobada en 1.999, el uso de jaulas minúsculas estaba prohibido y los países miembros tendrían un plazo de 13 años para adaptarse al reglamento y brindar espacios más cómodos a las gallinas.
El plazo se venció el primero de enero de 2012, pero, según denunció el portavoz comunitario de la Comisión Europea, Frederic Vincent, "Actualmente, 47 millones de gallinas" continúan presas en espacios muy reducidos.
Vincent, denunció que los huevos que ponen las gallinas en jaulas tan reducidas "son ilegales" y reiteró que “La Comisión lamenta que después de todo ese tiempo, más de la mitad de los Estados miembros de la UE no cumplieron con el reglamento".
De acuerdo a la ley, cada gallina tiene derecho a un espacio de al menos 750 centímetros cuadrados para estar cómoda, además de contar con un bebedero adecuado y nidos cómodos que le permitan satisfacer sus necesidades.
La Comisión Europea extendió el plazo por dos meses para que cada país resuelva la situación o, de lo contrario, deberá enfrentarse al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.