El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, señaló el miércoles que mientras las naciones deben continuar luchando contra el avance del COVID-19, está viendo lo que llamó “verdes destellos de esperanza” en la lucha para ralentizar la pandemia.
En su conferencia de prensa habitual, Tedros informó que hasta la fecha se han producido más de 435.000 muertes por el nuevo coronaviurs en América, África y Asia del Sur, con el número de casos aumentando rápidamente en ciertas áreas.
Pero señaló que hay resultados alentadores en las pruebas para un tratamiento, a los que se refirió como los “verdes destellos de esperanza” en medio de la pandemia.
Los resultados de las pruebas anunciados el martes por investigadores ingleses mostraron que la dexametasona, un esteroide común y económico, usado desde la década de los 1960 para reducir la inflamación, ha reducido la tasa de mortalidad en una tercera parte entre los pacientes más afectados y que han sido hospitalizados.
Los funcionarios de la OMS enfatizaron que el medicamento no cura el coronavirus o evita su contagio, pero sí alivia algunos de los síntomas más mortales en los pacientes de COVID-19 en condición crítica.
Los funcionarios también enfatizaron que la dexametasona solo debe usarse bajo una estricta supervisión médica. Dijeron que el medicamento es uno de los descubrimientos que se van a necesitar para lidiar efectivamente con la pandemia del COVID-19.