El aumento de la violencia y el inicio de una carrera armamentista amenazan con agravar la situación en Siria, luego del anuncio de que Rusia proveerá a ese país avanzados misiles aéreos y la decisión de los socios de la Unión Europea de no renovar un embargo de armas a los rebeldes sirios.
El vicecanciller ruso, Sergei Ryabkov, dijo este martes, que Moscú enviará sofisticados misiles antiaéreos S-300 como parte de un contrato firmado hace varios años.
"Consideramos que tales pasos son en gran medida un factor de contención para impedir que algunas 'cabezas calientes' den a este conflicto [...] un carácter internacional con participación de fuerzas externas", afirmó Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores, citado por las agencias rusas.
El viceministro Riábkov, añadió que el levantamiento de embargo de armas a la oposición siria por los socios europeos muestra su "doble rasero" y podría perjudicar la conferencia internacional sobre Siria propuesta por Moscú y Washington a realizarse en Ginebra.
La UE levantó el lunes el embargo que mantenía, aunque dijo que no entregará armamento antes del próximo 1 de agosto, intentando dar una oportunidad a que haya diálogo entre las partes.
Además estableció que la venta y entrega de equipos militares debe tener como única finalidad "la protección de civiles" y que deben tomarse ciertas cautelas en su suministro, sobre todo en lo relativo a quién recibe el armamento.
Rusia insiste en que los opositores sirios deben llevar a Ginebra "una delegación representativa, capaz de tomar decisiones en nombre de toda la oposición" y que ésta renucnia "a los intentos de usar la propia conferencia como instrumento para apartar del poder al Bashar Asad", señaló Riabkov.
Además, Moscú presiona para que acudan a la conferencia Irán, Egipto y Arabia Saudí, países de la región que no estuvieron en otra cita similar celebrada también en Ginebra hace un año, a finales de junio de 2012.
El vicecanciller ruso, Sergei Ryabkov, dijo este martes, que Moscú enviará sofisticados misiles antiaéreos S-300 como parte de un contrato firmado hace varios años.
"Consideramos que tales pasos son en gran medida un factor de contención para impedir que algunas 'cabezas calientes' den a este conflicto [...] un carácter internacional con participación de fuerzas externas", afirmó Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores, citado por las agencias rusas.
El viceministro Riábkov, añadió que el levantamiento de embargo de armas a la oposición siria por los socios europeos muestra su "doble rasero" y podría perjudicar la conferencia internacional sobre Siria propuesta por Moscú y Washington a realizarse en Ginebra.
La UE levantó el lunes el embargo que mantenía, aunque dijo que no entregará armamento antes del próximo 1 de agosto, intentando dar una oportunidad a que haya diálogo entre las partes.
Además estableció que la venta y entrega de equipos militares debe tener como única finalidad "la protección de civiles" y que deben tomarse ciertas cautelas en su suministro, sobre todo en lo relativo a quién recibe el armamento.
Rusia insiste en que los opositores sirios deben llevar a Ginebra "una delegación representativa, capaz de tomar decisiones en nombre de toda la oposición" y que ésta renucnia "a los intentos de usar la propia conferencia como instrumento para apartar del poder al Bashar Asad", señaló Riabkov.
Además, Moscú presiona para que acudan a la conferencia Irán, Egipto y Arabia Saudí, países de la región que no estuvieron en otra cita similar celebrada también en Ginebra hace un año, a finales de junio de 2012.