Regularmente, muchos médicos observan la fibrilación auricular (AF), un ritmo anormal del corazón, en sus pacientes de edad avanzada. Pero estudios recientes indican que un sorprendente número de mujeres de mediana edad, quienes están en todo lo demás muy saludables, al ser diagnosticadas con AF tienen más alto riesgo de muerte.
Judy Kulp visitó el Hospital de Mujeres de Boston para hacerse una revisión de filtración auricular.
“Se siente como un muchacho de séptimo grado que quiere ser baterista de una banda, pero no tiene sentido del ritmo”, explica Kulp.
El AF sucede cuando los impulsos eléctricos, en dos de las cuatro cámaras del corazón empiezan a andar a un ritmo irregular con un patrón caótico. Los doctores lo diagnostican cuando los pacientes tienen síntomas como palpitaciones del corazón, sin embargo esta no es una condición muy común en mujeres de edad mediana.
Entre 1993 y 2010, un grupo de investigadores internacionales realizaron el Estudio de la Salud de la Mujer. Recogieron información de 35.000 mujeres, con un promedio de 53 años de edad. Ninguna de las voluntarias tenía problemas previos de corazón. Sorprendentemente, las mujeres que sufrieron de AF reflejaron un riesgo de muerte dos veces mayor que el resto.
“Hay un incremento en el riesgo de muerto entre aquellas mujeres que desarrollan fibrilación auricular, incluso si el grupo era de absolutamente bajo riesgo en problemas de corazón”, dijo el doctor David Conen de la Universidad Hospital in Basil, Suiza.
Un factor determinante es si el AF es constante, indicó Christine Albert, cardióloga que también participo en el estudio.
“Cuando analizamos a las mujeres, quienes han tenido fibrilación aurículas corta e intermitente, un AF que viene y se va, no encontramos mayores números de mortalidad”, explicó Albert.
Los pacientes con AF son usualmente atendidos con medicación para reducir los niveles de presión alta y se les recomienda reducir su colesterol y no fumar.
